Casi el 70% de los empresarios de la construcción es optimista para el 2022

Fuente: El Economista: La región más optimista es el NOA, donde el 33% de los encuestados espera un 2022 de mayor actividad

El 68% de los empresarios consultados en un estudio de opinión se mostraron optimistas respecto al crecimiento de la actividad en el sector inmobiliario y de la construcción durante el 2022, de acuerdo con un informe presentado hoy por el Grupo Construya.

La 19a edición del Estudio de Opinión Construya «encontró optimismo entre empresarios y profesionales del sector en todo el país, quienes de todos modos reclaman mayor estabilidad cambiaria y acceso al crédito». «El 68% de los encuestados es optimista con respecto al 2022 y cree que el próximo año el nivel de actividad en el sector inmobiliario y de la construcción aumentará o en el peor de los casos se mantendrá igual», destaca el informe.

El trabajo del Grupo Construya destaca que «el 92% de las respuestas a nivel nacional afirman que es el privado quien empuja el sector a través de obras pequeñas, medianas y grandes, y de remodelaciones o ampliaciones».

La región más optimista es el NOA, donde el 33% de los encuestados espera un 2022 de mayor actividad. En cambio, el 42% de los encuestados en Cuyo cree que caerá la actividad en los próximos meses (42%).

En cuanto a las actividades, las inmobiliarias fueron el sector más golpeado en 2021, con casi la mitad de ellas (48%) viendo una caída en sus operaciones. «El dato no sorprende, ya que es sabido el impacto negativo que tuvo el cepo cambiario y la brecha cambiaria, al restringir las operaciones de compraventa de unidades terminadas y alentar la construcción desde el pozo», señala el informe, no obstante ello, las inmobiliarias son las más optimistas de cara al 2022.

El relevamiento sectorial se realizó entre el 15 y el 29 de noviembre de 2021, tuvo alcance nacional y se obtuvieron 420 respuestas.

El futuro de la profesión, eje del V Congreso Nacional de Arquitectos

Fuente: Clarín ~ Organizado por la SCA y la FADEA en un formato híbrido, contó con la participación de colegios profesionales de todo el país.

¿La constante es el cambio o solo varían las herramientas? Con esta pregunta-encuesta abrió el V Congreso Nacional FADEA, que se desarrolló en formato híbrido (presencial/virtual) en la sede de la SCA del 24 al 26 de noviembre.

Presentaron el evento Darío López, presidente de SCA; Gerardo Montarulli, presidente de la Federación Panamericana de Asociaciones de Arquitectos; Martín Capobianco, presidente de la FADEA, Claudia Hollenika, presidenta del Colegio de Arquitectos de Misiones; y la licenciada Eugenia Ctibor, presidenta de la Cámara del Ladrillo.

Además de los agradecimientos de rigor a participantes, auspiciantes y personal de la SCA, los temas omnipresentes fueron la necesidad de pensar los cambios para la pospandemia, recuperar el rol transformador de los arquitectos, actualizar el diseño curricular y apoyar y destacar la importancia de las entidades que representan a los profesionales.Eduardo Bekinschtein moderó el debate con Roberto Frangella.

Eduardo Bekinschtein moderó el debate con Roberto Frangella.

El encuentro se programó con dos mesas de debate interdisciplinarias y tres talleres para exponer las ponencias de participantes argentinos y extranjeros.

Después de la apertura se dio paso a las primeras ponencias, bajo el lema “El presente y el futuro del trabajo”. “¿Cómo organizar tu trabajo?” fue la pregunta que guió el taller del jueves y para el viernes el tema elegido fue “Capacitación permanente, herramienta para el trabajo”.

Más allá de estas divisiones formales, hubo problemáticas recurrentes en ponencias y debates. Todas las ponencias estarán en breve disponibles en la página de la SCA.

La cuestión de género

Más allá de que el jueves 25 de noviembre se conmemoró el Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer, la cuestión de género estuvo presente en varias de las charlas y fue el tema que introdujo la presentación del 4°EMA.

Andrea Pareja, vicepresidenta del Colegio de Arquitectos de Jujuy hizo foco en su propia experiencia. “En el ejercicio profesional, las arquitectas tienen que demostrar que saben. Entré a mi primer trabajo ‘a prueba’ junto con un varón que fue contratado y cobraba más que yo. A los tres meses quedé a cargo del estudio”, relató.

Y contó acerca de su miedo a perder el puesto por tomarse licencia por maternidad y de la vez en que, ejerciendo en el Instituto de la Vivienda, un jefe le pidió “por favor, que no engorde”.Las arquitectas deben demostrar siempre que saben, se dijo en una ponencia.

Las arquitectas deben demostrar siempre que saben, se dijo en una ponencia.

Inés Messore y Carolina Day expusieron sobre “Mujeres que construyen”, un programa de la SCA orientado a la capacitación de mujeres en técnicas constructivas.

Reciben cursos de mampostería, ladrillos cerámicos, pintura y revestimientos textiles y vinílicos, y otros trabajos hasta ahora realizados casi exclusivamente por varones en el mercado argentino. La intención es que las beneficiarias lo usen como salida económico-laboral y puedan a la vez mejorar sus propios hábitats.

Los estudiantes y el trabajo

Alejandro Borracchia, de la Facultad de Arquitectura, Diseño, Arte y Urbanismo de la Universidad de Morón, desafió a amplificar el campo de la arquitectura incorporando una visión más holística para enfrenar el cambio de paradigma.

El decano de Morón llamó a estudiar sobre vivienda social en las distintas ecorregiones del país, tener en cuenta nuevos materiales y nuevas tipologías para reactivar economías locales y dejar capacidad instalada.Conseguir empleo para los recién egresados es clave.

Conseguir empleo para los recién egresados es clave.

Puso como ejemplo las tesis de grado en la UM: son obras que se construyen y se donan a una comunidad. “Así nuestros estudiantes salen con un panorama mucho más amplio que si hicieran una maqueta”, aseguró.

Desde Rosario, Berenice Polenta, Marcelo Barraley Aldana Presce trajeron la experiencia de Hacemos PATA, un programa que se traduce como “Primera Asistencia Técnica en Arquitectura”.Una de las obras donadas a la comunidad por estudiantes de la Universidad de Morón.

Una de las obras donadas a la comunidad por estudiantes de la Universidad de Morón.

​Busca que profesionales con menos de dos años de graduados sean empleados para construir o ampliar viviendas para sectores vulnerables. Y a la vez se inscriban en los colegios y obtengan su matrícula para realizar estas tareas, por supuesto, remuneradas.

Los concursos como plataforma

Uno desde Colombia y el otro desde la provincia de Buenos Aires, Juan Sebastián Restrepo y Juan Martín Flores concidieron en relatar sus experiencias como “concurseros”: así consiguieron sus primeras obras, de una envergadura impensada.

Bay Park, en China, proyecto ganado por concurso por Juan Sebastián Restrepo y equipo.

Bay Park, en China, proyecto ganado por concurso por Juan Sebastián Restrepo y equipo.

Restrepo decretó “la muerte del arquitecto estrella” y sostuvo que el trabajo actual en un estudio debe ser horizontal, colaborativo y transdisciplinar.

Desde su Taller de Arquitectos apostaron desde el principio a los concursos, primero locales y luego internacionales. Así ganaron obras en China, como el Lechee Park y el Bay Park, y a partir de eso fueron convocados para otros proyectos.

La primera obra de Juan Martín Flores también fue a partir de un concurso: el Anexo de la Legislatura de La Plata. Después de ese triunfo impensado, con su estudio SMF participaron en más de 120 certámenes a lo largo de 15 años.Capilla del perpetuo socorro, un proyecto para concurso de Juan Martín Flores.

Capilla del perpetuo socorro, un proyecto para concurso de Juan Martín Flores.

“Creo en el concurso, el mundo de las ideas, como la manera de entender la arquitectura”, sostuvo. Y contó que fueron premiados en 2015 por un modelo de ciudad sustentable para China y que después de haber ganado un concurso para 20 viviendas en Seúl los contrataron para transformar una estación de subtes.

También gracias a la vidriera de estos certámenes pudieron hacer un taller con los pritzker de RCR en Olot. “En lo global hay una oportunidad, pero hay que agregar valor e innovación”, recomendó.

Pensar en el bien común

De reconocida militancia en el campo social, Roberto Frangella recordó que hay “dos Argentinas”, una formal y una informal. Y opinó que lamentablemente los arquitectos trabajan solo en el sector formal, lo que constituye una pandemia peor que la del covid.

“Estamos en el momento indicado para revertir esta situación y tratar de llegar a la igualdad social. La profesión debe ser útil a todos los sectores sociales, no solo a los formales. Tenemos que coordinar nuestro trabajo con el de otras disciplinas y salvar el abismo entre la profesión y los sectores que más nos necesitan”, aseguró.Dibujo de Roberto Frangella sobre el papel del arquitecto con los más vulnerables.

Dibujo de Roberto Frangella sobre el papel del arquitecto con los más vulnerables.

Pidió dejar de confiar en los gobiernos porque es demasiada la tarea por delante. Estos conceptos deben cambiar desde la formación, que debe encararse no solo para el lucimiento sino para brindar soluciones. Para Frangella es “más difícil y más desafiante hacer una obra de arte con materiales que no sean de última generación como los de esas torres que llegan al infinito”.

Recordó que trabaja en el CPAU con el programa Arquitectura para el bien común. Y cerró con un ruego: “Que todos los colegios tomen nota de esto y participen”.

A su turno, Myriam Heredia, especialista en políticas de vivienda, coincidió en recalcar la importancia de paliar el déficit habitacional y para ello proponer soluciones más que esperar recursos del Estado.

“Trabajamos para el 1 % de la población y tenemos que romper esa barrera”, pidió. “Uno de cada tres hogares tiene problemas de vivienda, solo en la provincia de Buenos Aires faltan 200 mil”, apuntó. Y luego detalló su esquema para un “alquiler social”.

Dado que hay unas 52 mil viviendas vacías en la provincia (según el censo 2010), podría crearse un fondo fiduciario para comprarlas y alquilarlas a los sectores de clase media-baja con opción a compra.Remediar el déficit habitacional fue otra de las premisas.

Remediar el déficit habitacional fue otra de las premisas.

“Está probado que representa el mismo costo comprar una casa que hacerla de cero... y la construcción además lleva varios años”, afirmó. Y llamó a trabajar con los municipios para que condone deudas a las viviendas desocupadas, y a que se readjudiquen casas del plan Procrear deshabitadas. El sistema podría autofinanciarse con la recuperación de la capacidad crediticia, concluyó.

¿Comitentes o clientes?

Desde Corrientes, Eduardo Cunha Ferré analizó la formación académica. Aseguró que en la universidad el arquitecto tiene escasa preparación para el trabajo. “No sabe contratar. No sabe cobrar. No sabe gestionar. Y por eso la mayoría busca trabajo a sueldo, aunque este sea menor que un posible honorario”, afirmó, instando a cambiar los programas de estudios.

En el mismo sentido, Gervasio Ruíz de Gopetegui, docente de la Universidad de Belgrano, sostuvo que la mayoría de los programas preparan para “proyecto y dirección de obra”, cuando estas ya no son la principal fuente de trabajo.

“El cambio de paradigma requiere de nuevos saberes, como análisis de costos, marketing, diseño de producto, conocimientos contables y financieros, saber analizar un proyecto de inversión y buscar financiamiento”, concluyó.Para posicionarse en el mercado, ios arquitectos deben llamar clientes a los clientes, sostuvo un expositor.

Para posicionarse en el mercado, ios arquitectos deben llamar clientes a los clientes, sostuvo un expositor.

Por su parte, Carlos Savransky instó a dejar de llamar “comitentes” a quienes realizan encargos y “tratarlos como lo que son, clientes”. El desarrollador recordó que “no hay arquitectura sin dinero” y que hay que considerar distintos tipos de clientes: desde los chicos hasta los grandes y también a los inversores.

Se declaró en contra de los honorarios a porcentaje y recomendó hacer “un menú de servicios profesionales” con sus tarifas. Todo ello sin olvidar, por supuesto, la estética y la belleza.

¡Ah! La respuesta ganadora de la encuesta del principio fue “la constante es el cambio”. Se podría agregar el viejo axioma darwiniano, “solo sobreviven los que se adaptan”.

Anuncios y eventos

El congreso fue la plataforma apropiada para realizar varios anuncios y festejar el regreso a la presencialidad.

María Samaniego -ponente en uno de los debates del jueves- presentó la Bienal Panamericana de Quito 2022, que tendrá una imagen renovada y volverá a ser presencial, aunque mantendrá varias actividades en formato virtual.

Entre los invitados se encuentran DOGMA, de Italia; Gustavo Utrabo, de Brasil; Livni, de Uruguay, Usos/Arquitectura, de España y Colombia; Barclay & Crousse, de Perú; BAGG, de Argentina y William J.R. Curtis, de Inglaterra.Tropicario Jardín Botánico de Bogotá, premio mundial en la BAQ2020.

Tropicario Jardín Botánico de Bogotá, premio mundial en la BAQ2020.

El tema de la próxima BAQ será “Inflexiones: Volver a ver”, y el objetivo será analizar si la arquitectura ha sido capaz de adaptarse e innovar durante la pandemia de coronavirus, a través de charlas, seminarios, mesas redondas, entre otros formatos. La presidenta de la Bienal es Yadhira Álvarez, del colegio de arquitectos de Pichincha (Ecuador).

Por su parte Diana Zirulnik y Nurit Schmulevich, del Colegio de Arquitectas de Mendoza, convocaron al Encuentro de Mujeres Arquitectas que se hará en esa provincia en abril de 2022.

Se trata del 4° EMA, que se inició en 2017 en Tucumán y luego se realizó en La Rioja (2018) y en San Juan (2019).

El encuentro promueve la igualdad de oportunidades y se realizará de forma virtual y presencial. Sus principales objetivos son intercambiar ideas, reflexiones y proyectos relacionados con la profesión, en el marco de los objetivos de desarrollo sostenible por un lado y de la equidad, la inclusión y la diversidad, por otro.

Esto se concretará a través de mesas de intercambio y ponencias basadas en los ejes temáticos Arquitectura, Equidad, Inclusión y diversidad.

Se aprovechará la oportunidad para visitar obras de arquitectas locales. “También se buscará afianzar la red nacional y la organización MARA, Mesa de Arquitectas Argentinas, con la que hemos organizado el Pre EMA”, comentó Schmulevich.

Un prestigioso arquitecto de Nueva York desembarca en Argentina con dos megaproyectos

Fuente: BAE ~ Eran Chen, fundador y director de ODA Architecture, diseñó el Paseo Gigena, que se construirá sobre el estacionamiento frente al Hipódromo de Palermo, y el edificio Zeta Belgrano, que costará 40 millones de dólares y revolucionará el sentido de comunidad en los departamentos.

«Si todos los edificios fueran como este, viviríamos en una ciudad mucho mejor». Así define Eran Chen, uno de los arquitectos más prolíficos de Nueva York, al Paseo Gigena, uno de sus dos ambiciosos proyectos en Ciudad de Buenos Aires. El estudio que dirige hace 15 años, ODA Architecture, desembarcó en el país de la mano de BSD Investments, con el objetivo de brindar nuevas soluciones al «hermoso y tradicional» barrio de Belgrano y «revincular» la zona del Hipódromo de Palermo, además de dar «otra fluidez al barrio» y generar «una oferta inmobiliaria que hoy no existe».

«Argentina siempre fue una mezcla interesante de América Latina y Europa, y esa mezcla es lo que encuentro fascinante», recordó Chen, que visitó el país cinco veces antes de asociarse con BSD. La desarrolladora hará dos edificios: uno «sin precedentes» en Zabala al 1800 y otro en el predio conocido como Ámbito Gigena, donde hoy se encuentra un estacionamiento entre el Hipódromo y el Rosedal de Palermo. 

Ambos fueron diseñados por Chen, que los presentó en un evento exclusivo del que participó BAE Negocios, y tienen un nuevo tipo de arquitectura para las ciudades de mucha densidad, que busca generar más luz solar, más exterior y más comunidad. Eso mismo se refleja en Zeta Belgrano, que tiene un diseño hecho en base a la relación de los argentinos con el exterior y el exterior y los vínculos que existen entre los locales. 

El edificio Zeta se ubicará en Zabala al 1800

En Zeta el balcón es una habitación más, rompiendo así con el balcón largo que caracteriza al barrio. Cada balcón tiene entre tres y cuatro metros y no se superpone con los de abajo o arriba: cada uno tiene su propia esquina, algo que «refuerza el sentido de comunidad». Es nuevo y sorprendente. «El aspecto será diferente, pero espero que refleje el espíritu porteño y se convierta en una expresión moderna de eso», confesó el arquitecto reconocido, entre otros, por el American Institute of Architects y la Society of American Registered Architects.

El desembolso para este proyecto es de 40 millones de dólares, que para Chen valen la pena por «el valor agregado de la arquitectura». Y esa inversión se verá en las amenidades, que serán «una versión más amplia de los departamentos»: seguridad privada y recepción de envíos, bicicleteros, cocheras, laundry y wifi, pileta , spa, training room, vestuarios, entre otros.

El concepto de Zeta Belgrano refuerza la comunidad sin interferir con la privacidad de cada departamento

Serán 70 departamentos de 2 a 4 ambientes repartidos en 14 pisos, con un valor promedio de 3.500 dólares por metro cuadrado. Cada hogar tendrá grnades ventanales, para mostrar el intermedio entre el afuera y el adentro. ¿No interfiere eso con la privacidad? Chen dijo a este medio que el concepto de la individualidad está «sobrevalorado»: «cada departamento es único, pero somos parte de una comunidad». En este sentido, remarcó que la idea de devolver la idea de «un patio central» y la interacción entre los propietarios no implica que desde afuera se vea para adentro de cada departamento. «Nunca diseñé algo así, y no lo haría en otro lado», subrayó Chen.

El Paseo Gigena: la resurrección de dos zonas muertas

Al recorrer por primera vez el estacionamiento frente al Hipódromo de Palermo, Eran Chen vio tres problemas: la avenida Libertador peatonal termina en avenida Dorrego, por Marcelino Freyre «no camina nadie» y desde el tercer piso del edificio «se ve todo». Inmediatamente se le ocurrió una idea: conectar dos zonas muertas y formar un edificio que junte «lo inclusivo con lo exclusivo y hacer una unión exitosa».

El arquitecto mostró a BAE Negocios el resultado: un proyecto con una estructura moderna e innovadora que contará con locales de uso gastronómico y comercial, paseo al aire libre, oficinas y playa de estacionamiento cubierto. Casos exitosos de este tipo hay y de sobra: el Buenos Aires Design —que ahora será reconvertido—, el Centro Cultural Recoleta y el Centro de exposiciones y convenciones en Plaza Houssay, entre otros. 

El Paseo Gigena quiere conectar dos barrios y generar «un mundo adentro de otro mundo»

Para construir en 18 meses el Paseo Gigena, cuyo nombre está inspirado en el jockey Argentino Gigena, quien murió mientras corría una carrera en 1912; se mantendrá la estructura actual, mediante el movimiento de algunas piezas y la añadidura de otras. Esto mismo se hizo en Plaza Houssay: “Partimos de una estructura que ya existía, que en ese caso era la plaza con cocheras abajo y lo que hicimos fue tratar de transformarla o refuncionalizarla en algo que le sirva a la gente”, explicó el arquitecto y urbanista Álvaro García Resta, secretario de Desarrollo Urbano del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

El emprendimiento será de 16.296 metros cuadrados, de los cuales más de 4.000 serán de terraza abierta al público. Tendrá senderos peatonales, vistas en sus cuatro frentes, locales comerciales, bares y hasta oficinas. El edificio, contó Chen, cuenta «la historia en la que cree y estuvo luchando por muchos años». La gente podrá bajar y subir sin interferir con las oficinas para recorrer por un parque «dinámico» que contará con flora nativa y propuestas de todo tipo. Esto, para Chen, es clave: «Si arriba no hay nada, nadie sube. El mundo está lleno de jardines que nadie ve».

El sendero promete generar un recorrido único

BSD Investments logró mediante una licitación de la Ciudad de Buenos Aires la concesión por 15 años del espacio. La desarrolladora se asoción con ODA Architecture y complementará, a nivel local, con el estudio Aisenson y Coinsa.

«Yo creo que ambos proyectos son de gran alcance e innovadores a su manera. Zeta toma todo lo bueno que veo en la gente de Argentina y lo usa como inspiración para el diseño.  Paseo Gigena yo creo que será un cambio de juego para Buenos Aires. Equilibra la fina línea entre igualdad y exclusividad, entre el Rosedal de Palermo y el Hipódromo de Palermo, entre un edificio de oficinas y un paisaje elevado», resumió Chen, quien quiere asegurarse de que a la Ciudad le interese que el proyecto sea un éxito. Orgullosamente, concluyó: «Yo elegí Argentina y Argentina me eligió a mí«.

Las ciudades del futuro contra la jungla de cemento

Fuente: La Nación ~ Bosques verticales, biomímesis y autorregulación de la temperatura: las nuevas construcciones en busca de una relación más armónica entre arquitectura y naturaleza.

La crisis climática que deja sus huellas en las grandes ciudades impacta directamente en las nuevas formas de habitar. Estas tramas urbanas que sufren los estragos del calentamiento global son el eje de los experimentos proyectuales que ensayan fórmulas para un futuro con movilidad sustentable, huella de carbono neutral y parámetros de la biofilia, la disciplina que aplica patrones de la naturaleza para promover el bienestar.

Después de la cumbre celebrada a principios de noviembre en Glasgow los países asistentes se comprometieron a empatizar con “la última oportunidad para salvar el planeta”. La alarmante consigna de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP 26 impulsó que 130 líderes mundiales prometieran acuerdos para terminar con la deforestación de cara al 2030. La iniciativa tiene carácter de urgencia.

La tala de árboles contribuye al cambio climático porque agota los bosques que absorben grandes cantidades de CO2. Y esta tragedia ambiental no solo pone en riesgo los ecosistemas. También levanta la temperatura de las grandes ciudades.

El Bosque Vertical de Milán fue uno de los proyectos arquitectónicos pioneros en repensar soluciones constructivas que mejoren la calidad del aire. Este complejo verde proyectado por el arquitecto Stefano Boeri transformó una zona degradada en un auténtico pulmón vegetal que dio 27 brotes alrededor del mundo

El Bosque Vertical de Milán fue uno de los proyectos arquitectónicos pioneros en repensar soluciones constructivas que mejoren la calidad del aire. Este complejo verde proyectado por el arquitecto Stefano Boeri transformó una zona degradada en un auténtico pulmón vegetal que dio 27 brotes alrededor del mundo. En Huanggang y Nanjing (China) se inauguraron los últimos, con especies autóctonas que contribuirán a la regeneración de la biodiversidad local y la reducción de las emisiones de CO2 en unas 18 toneladas. Sus vecinos, en tanto, gozarán de hasta 16,5 toneladas de oxígeno al año. En El Cairo, Mumbai, Fráncfort, Bogotá y San Pablo también se pueden ver estas ciudades en altura con fachadas vegetales, producto de la investigación de botánicos y etólogos que previamente cultivan las especies en viveros.

La refuncionalización de la Torre Pirelli, en Milán, a cargo de  Stefano Boeri, incluirá un invernadero propio y producirá la misma cantidad de oxígeno que un bosque de 10.000 m2
La refuncionalización de la Torre Pirelli, en Milán, a cargo de Stefano Boeri, incluirá un invernadero propio y producirá la misma cantidad de oxígeno que un bosque de 10.000 m2

Boeri, el gurú de la arquitectura verde, también se hará cargo de la refuncionalización de la Torre Pirelli, un ícono milanés que fue clausurado por favorecer la contaminación, incumplir con los estándares básicos de sostenibilidad y los sistemas antisísmicos. Junto al estudio Diller Scofidio + Renfro pondrán el conjunto en valor para atraer aire fresco a la zona de Porta Nuova.

Con un modelo de uso mixto de espacios públicos y residenciales y la implantación de un puente, la torre de 110 metros de altura combinará aromas de 13 mil esencias y cerca de 500 árboles y arbustos que, piso tras piso y estación tras estación, mutará del verde, al rojo y amarillo. “Tomando la tradición del jardín italiano y trabajando en la idea de un jardín botánico hemos pensado la relación entre la arquitectura y la naturaleza en un formato disruptivo”, señaló Boeri sobre el edificio que contará con un laboratorio e invernadero propios y producirá la misma cantidad de oxígeno que un bosque de 10 mil metros cuadrados.

El arquitecto italiano acaba de lanzar Urbania (Editorial Laterza), el libro donde reflexiona sobre el urbanismo pospandémico: “Si nos centramos en los cambios estructurales acelerados por la emergencia sanitaria notamos que se desdibujan los límites en las dimensiones de la vida cotidiana (el hogar, el trabajo y el ocio). Como resultado, las ciudades deben adaptarse a este nuevo escenario en constante evolución, entender las nuevas necesidades. Pasamos de una visión de cajas colocadas una al lado de la otra a una más osmótica. Los espacios deben reflejar esta situación y facilitarla”, plantea.

El complejo Bliss

Imaginar corredores de biodiversidad donde la ciudad y la naturaleza entablen un diálogo armónico implica un cambio de paradigma. Nuevas narrativas que respondan no sólo al futuro de los tejidos urbanos sino al anhelo de mejorar nuestra calidad de vida.

El complejo Bliss que se levantará en San Fernando con 16 edificios, una laguna natural y espacios verdes promete un microclima con control térmico del espacio y ahorro energético
El complejo Bliss que se levantará en San Fernando con 16 edificios, una laguna natural y espacios verdes promete un microclima con control térmico del espacio y ahorro energético

En Buenos Aires, el complejo Bliss promete un sistema equilibrado que se levantará en San Fernando con 16 edificios rodeados de laguna natural y espacios verdes que promoverán un microclima, el control térmico del espacio y su consiguiente ahorro energético. Detrás de esta novedad está el estudio MRA+A (Mario Roberto Álvarez Asociados). De planta industrial a ecosistema urbano, Bliss se levantará sobre el ex centro logístico Molinos incorporando la dimensión ambiental. “El concepto urbano es el de una ciudad del siglo XXI, focalizado en el entorno. La misma cantidad de habitantes que en una ciudad convencional viven en una manzana aquí contarán con 9 hectáreas de terreno”, explica Marcelo Rodríguez Cáceres, gerente general de Bliss Buenos Aires, desarrollador del emprendimiento que se postula como una ciudad de 15 minutos en sí misma. Con distancias que no superarán los 4 kilómetros para desplazarse a pie y resolver servicios, educación y ocio, la micromovilidad será uno de los puntales de Bliss.

En Buenos Aires, el complejo Bliss promete un sistema equilibrado que se levantará en San Fernando con 16 edificios rodeados de laguna natural y espacios verdes que promoverán un microclima, el control térmico del espacio y su consiguiente ahorro energético.

El arquitecto danés Bjarke Ingels, al frente del emblemático estudio BIG (Bjarke Ingels Group) es uno de los referentes de esta problemática que cada vez más exige ciudades más caminables y descentralización.

El master plan que desarrolló para Toyota Woven City, al pie del monte Fuji (Japón), es una auténtica incubadora urbana que impulsa el desarrollo, promueve la conectividad en formatos alternativos, alienta el diálogo con la naturaleza y el equilibrio ambiental. Un experimento de laboratorio que plantea un cambio de mentalidad: “Robótica para la vida cotidiana, naturaleza y energía solar”, enumera.

El autor del búnker de Google de San Francisco y la torre del World Trade Center de Nueva York eligió una ex fábrica de la ciudad de Susono para bocetar Toyota Woven City, concebida como “un laboratorio vivo para probar y mejorar la movilidad, la autonomía, la conectividad, la infraestructura impulsada por hidrógeno y las alianzas colaborativas con la industria”, explica Ingels, el arquistar detrás de este prototipo de ciudad. “Promover diferentes modos de transporte para conexiones más fáciles y seguras implica abordar el sistema tradicional de otra manera.

Al pie del monte Fuji, en Japón, el arquitecto danés Bjarke Ingels proyectó Toyota Woven City, un laboratorio vivo con vehículos autónomos rápidos y un parque lineal
Al pie del monte Fuji, en Japón, el arquitecto danés Bjarke Ingels proyectó Toyota Woven City, un laboratorio vivo con vehículos autónomos rápidos y un parque lineal

El espacio público de Woven City asumirá 3 formatos: una calle principal para vehículos autónomos rápidos, un paseo recreativo ocupado por otros modos de transporte y, finalmente, el parque lineal, que conecta a las personas con la naturaleza. Este esquema está organizado en grupos de bloques urbanos que forman un vacío central o patio, al que se accede por el parque lineal”, señala el proyectista, que también dotará a las unidades de vivienda con dispositivos de inteligencia artificial.

Como una colonia de termitas

Para Mónica Cohen, fundadora de Biomimicry Argentina Network cada vez es más importante contemplar los fundamentos de la biomímesis en los desarrollos urbanos. Bio significa vida y mímesis, imitar. Así, la arquitecta propone “entender a la naturaleza como mentora para encontrar soluciones innovadoras en vez de tomarla como recurso”. Para la especialista, uno de los proyectos que persigue estos conceptos es el centro comercial de Zimbabue diseñado en función de una colonia de termitas.

El arquitecto Michael Pearce se basó en la dinámica de edificación de las termitas para construir sus nidos. “La clave es el principio básico de la termorregulación y la forma de chimenea que permite que el aire caliente suba promoviendo la renovación de aire fresco en la base. Este centro comercial basa el control térmico en la ventilación y calefacción natural.

El complejo cuenta con múltiples ventilaciones. La masa del edificio lo enfría o lo calienta en función de cuál esté más caliente: el hormigón de la estructura o el aire”, explica Cohen y agrega que las soluciones basadas en la naturaleza pueden favorecer la urbanización sostenible, restaurar ecosistemas degradados, mejorar la adaptación y mitigación del cambio climático.

La problemática del aire fresco en topografías desfavorables también fue el eje del proyecto de Al Wasl Plaza, el espacio central de la Expo Dubai 2020 que lideró el arquitecto argentino Alejandro Stochetti. Concebido como un jardín, un auténtico oasis en medio del desierto, este espacio de encuentro nació con la misión de “mejorar el confort del espacio público”, según Stochetti.

La solución: disminuir la altura del jardín hacia el centro para promover el disfrute de aire fresco a escala humana. “Además, decidimos proponer una estructura de sombra para disminuir la radiación solar directa. Pensamos en cubrir esta estructura con un material que permitiera el movimiento de aire para evitar la acumulación de la fina arena del desierto, para dejar que el aire más caliente fluya fuera de la estructura y para impedir que el agua de las lluvias poco recurrentes pero intensas se acumule en esta cubierta”. Mientras que la estructura de sombra protege del sol durante el día, por la noche se convierte en una pantalla para proyecciones inmersivas.

Las junglas de cemento, hornos urbanos que levantan la temperatura, tienen la chance de promover la resiliencia de las ciudades donde vivimos. Refrescar los tejidos, el gran desafío.

Arquitectos locales premiados por el desarrollo de una innovadora vivienda

Fuente: En Linea Noticias ~ La distinción fue otorgada por el Colegio de Arquitectos de la provincia de Buenos Aires.

Este sábado se conoció que los arquitectos olavarrienses Federico y Julio Bide fueron premiados en el marco de un concurso de propiciado por el Colegio de Arquitectos de la Provincia de Buenos Aires. Se premió el diseño de una innovadora vivienda unifamiliar y homologada para obtener el sistema de crédito PRO.CRE.AR.

Según contaron del Estudio de Arquitectura y Diseño Bide el diseño trata de una vivienda «mínima, ampliable de 60 m2 a 90 / 120 m2 y homologada para obtener un préstamo del Sistema Procrear».

Cuentan además haber «proyectado una vivienda simple, austera, ecológica, sustentable, de bajo consumo energético, de construcción en taller. 80% y/o in situ, posada sobre una platea de H*A*».

«La forma limpia y transparente encaja en lotes entre medianeras y/o esquinas. La distribución espacial proporciona flexibilidad, sincera los espacios y crea intimidad a la vez. Con equilibrio compositivo entre vacíos y llenos, muestra contundencia y liviandad a la vez», agregan.

«Hemos elegido el color blanco, como imagen pura, pero adaptable a cualquier gama cromática», cierran.

En fotos: esta casa de Nordelta ganó un premio internacional de arquitectura

Fuente: La Nación ~ Es una obra del estudio ATV Arquitectos ubicada a orillas del lago del barrio privado.

Por el diseño de una casa ubicada a orillas de una laguna en Nordelta, un estudio argentino de arquitectura acaba de recibir una mención de honor en los premios Architecture MasterPrize (AMP), que reconocen la mejor arquitectura a nivel mundial. Se trata de ATV Arquitectos, distinguido en la Categoría Arquitectura Unifamiliar Residencial, por su obra “Casa Cudich Drago”.

La casa recibió una mención de honor en los premios Architecture MasterPrize
La casa recibió una mención de honor en los premios Architecture MasterPrize Photographer: Albano Garcia

Para otorgar los premios, un jurado calificado integrado por profesionales de distintas nacionalidades selecciona los mejores diseños en distintas disciplinas de arquitectura, diseño de interiores y arquitectura paisajística. El objetivo es promover la apreciación de las obras alrededor del mundo y que la excelencia y la creatividad de las mismas sean valoradas. Este año, se postularon edificaciones de 65 países.

El estar principal de la casa con amplios ventanales hacia la pileta
El estar principal de la casa con amplios ventanales hacia la piletaPhotographer: Albano Garcia

Una de las distinciones del concurso fue para la Casa Cudich Drago, cuyo nombre hace referencia a la pareja de propietarios. Se trata de una obra de ATV Arquitectos que se encuentra ubicada a orillas de una laguna en el barrio de Nordelta, en la provincia de Buenos Aires. Está bordeada por agua en dos de sus lados, hacia los cuales se abren las visuales. Sus creadores destacan que la construcción busca generar diálogos permanentes con el entorno.

La pileta conecta el interior con el exterior
La pileta conecta el interior con el exteriorPhotographer: Albano Garcia

Se trata de un proyecto por encargo que comenzó a diseñarse en 2016 y concluyó en 2019, según cuenta a LA NACION Ignacio Trabucchi, socio fundador y director comercial y de planificación estratégica de ATV Arquitectos. “Es una de las pocas casas que hicimos como desarrollistas y muy esporádicamente hacemos otros proyectos de otras tipologías. Fue un pedido especial de una familia compuesta por una pareja e hijos chicos y adolescentes”, indica.

El patio interno es el corazón de la casa y conecta todos los ambientes en ambas plantas
El patio interno es el corazón de la casa y conecta todos los ambientes en ambas plantas

Remarca que la ubicación del lote les permitió “experimentar en la relación de la obra con el entorno”. La familia se contactó con el estudio luego de haber visto una obra que había realizado en Pinamar. “El proceso fue una satisfacción que pude darme como arquitecto. Nos dieron mucha libertad y al mismo tiempo hubo mucho intercambio con ellos”, afirma.

Las habitación principal y el resto de los dormitorios se encuentran en la planta alta
Las habitación principal y el resto de los dormitorios se encuentran en la planta alta Photographer: Albano Garcia

Aún sorprendido por la mención de honor, Trabucchi expresa: “Nos sentimos muy orgullosos de haber sido distinguidos en este certamen internacional que reconoce la excelencia y la creatividad de la arquitectura a nivel mundial. Es un honor ser parte de este reconocimiento de tanta trascendencia”.

Los detalles de la casa

La propiedad tiene 510 m² en total, distribuidos en dos plantas. El eje de la obra es la fusión del paisaje interior y exterior, en donde un patio interno articula los distintos usos de la vivienda y conecta los dos pisos. A partir de este vacío, el espacio se redefine como una serie de transiciones verticales y horizontales, entre lo público y lo privado, buscando que los limites se difuminen. “Tiene una estética moderna y la particularidad está en la búsqueda de las relaciones con el entorno”, especifica el arquitecto.

La casa se encuentra bordeada por agua en dos de sus lados
La casa se encuentra bordeada por agua en dos de sus ladosPhotographer: Albano Garcia

En la planta baja, la pileta flota sobre la barranca y articula la laguna con el espacio semicubierto del quincho y el estar. Ese ambiente de la casa aparece como un lugar intermedio entre dos exteriores distintos: uno “propio” y el que le pertenece al paisaje. En la planta alta, los dormitorios quedan contenidos en dos volúmenes definidos también por el vacío del patio.

La pileta flota sobre la barranca y articula la laguna con el espacio semicubierto del quincho y el estar
La pileta flota sobre la barranca y articula la laguna con el espacio semicubierto del quincho y el estar

Los principales materiales con los que se realizó la obra son hormigón y madera, proponiendo al primero como el que define la estructura tectónico-espacial del proyecto. Los tabiques soportan las losas que a su vez cuelgan de las vigas superiores. La estructura, con diferentes texturas y dimensiones, define los límites, potencia la planta liberada del sector público y posibilita que ese espacio sea etéreo, ya que las carpinterías pueden abrirse en su totalidad para formar un espacio continuo semicubierto.

A la derecha, el espacio semicubierto del quincho y a la izquierda, la pileta
A la derecha, el espacio semicubierto del quincho y a la izquierda, la pileta

Aunque el proyecto es anterior a la llegada del coronavirus, el planteo del estudio se adecúa a la perfección a las necesidades que el aislamiento obligatorio impuso. “La casa propone un modo de vida que tiene que ver con el ideal pospandemia: trata de integrase a la naturaleza pero a la vez mantener intimidad, lograr distintos grados de visuales hacia el exterior, generar que todos los ambientes no terminen en sí mismos sino que se expandan”, explica Trabucchi.

¿El objetivo final de la obra? Generar bienestar a quienes habitan los espacios, según expresa el especialista, que además remarca que una de las enseñanzas que deja la llegada de la pandemia tiene que ver con la búsqueda de viviendas que recuperen “la naturaleza, la calidez, las expansiones y la fluidez espacial. La arquitectura puede manipular todas esas variables de forma positiva y es importante hacer estos planteos”, asegura.

Jorge Moscato. “Construir una universidad es una tarea de una generación”

Fuente: Página12 ~ Al frente de la reconstrucción de la Universidad de Lanús y de los nuevos edificios de la Arturo Jauretche, el premiado arquitecto destaca el diseño de las nuevas casas de estudio del conurbano y remarca la importancia de pensar espacios que respondan a las necesidades de cada comunidad. 

Jorge Moscato, el arquitecto que dirigió la reconstrucción de la Universidad Nacional de Lanús (UNLA) y la Universidad Nacional Arturo Jauretche (UNAJ), hoy tiene a su cargo la tarea de recuperación y construcción del nuevo Departamento de Ciencias de la Salud de la UNAJ, una obra que estará terminada en abril de 2022 y que forma parte del Programa Nacional de Infraestructura Universitaria, que impulsa la edificación de 73 nuevas obras en 48 universidades públicas de todo el país.

Nacido en el primer peronismo y criado en el conurbano bonaerense, Moscato se formó en la educación pública, primero como estudiante y luego como docente universitario. Hoy se declara defensor de las banderas de la movilidad social ascendente y se define como “un hijo de la cultura del peronismo”.

El arquitecto que está al frente del premiado estudio Moscato – Schere y que forma parte de la corriente arquitectónica “Los Nac&Pop”, lleva una vida atravesada por la arquitectura: partiendo desde el diseño de su primera casa, que se la construyó a su padre cuando recién cursaba el cuarto año de la carrera; hasta la actualidad, con la construcción de una nueva obra en la UNAJ junto a sus hijos, Joaquín y Agustín, que están destinados a continuar su legado porque, según enfatizó Moscato, “construir una universidad es una tarea de una generación”.

En diálogo con el Suplemento Universidad, compartió su pasión por la arquitectura en una charla que, al igual que su vida, estuvo atravesada por las aulas de la educación pública, la cultura del conurbano y la voluntad propia de la política.

– ¿Qué particularidades tiene la construcción de una universidad pública?

– Las universidades en Argentina se hacen al revés que en el resto del planeta: acá se crea una universidad y, de pronto, aparecen 5.000 alumnos y la universidad solo tiene cinco aulas. Siempre sucede que ya está todo el mundo preparado para estudiar y el edificio recién llega cuando ya hay tipos que están por la mitad de la carrera o que están graduándose. Entonces, el principal tema es producir una arquitectura muy educadora, una arquitectura que le dice a la gente que esto es una universidad pública, que esto es importante, que tiene un rol institucional esa arquitectura, pero lo real es que esa arquitectura llega después que los alumnos.

– ¿Cómo definiría a la arquitectura de las universidades más nuevas?

– Son muy sencillas y prestan un servicio excepcional.

En mi opinión, la arquitectura de las universidades del conurbano es de la mejor que hay. Es una arquitectura siempre excelente, pero que cuida mucho los recursos. No tiene las posibilidades de hacer universidades de lujo. La obra en la periferia es básica y no tiene firuletes, solo tiene nada más que lo esencial. A mí me ha tocado hacer dos universidades: la de Lanús y la Arturo Jauretche. Y la obra es básica. Es como si pasara por el túnel del viento. Si agrego un parasol que no corresponde, se lo lleva el viento y lo pierde. Se lo lleva el viento económico, digamos.

Su última intervención

El nuevo edificio del Instituto de Ciencias de la Salud de la UNAJ, ubicado en el predio de la Avenida Calchaquí, constará de 996 metros cuadrados conformados por siete aulas, con una capacidad estimada de 30 alumnos cada una, que permitirá ubicar a 630 estudiantes de las carreras de Medicina, Bioquímica, Enfermería, Organización y Asistencia de Quirófanos, Kinesiología y Fisiatría. Además, se construirán dos laboratorios para albergar a 96 alumnos por cada turno y un salón auditorio con una capacidad para 80 personas. Se estima que esta obra, que comenzó el 7 de junio, se concretará en abril de 2022, luego de trece meses de trabajo.

Es un edificio importante, que no tiene límites. La fachada tiene unos parasoles inclinados, después viene el patio, en la parte de atrás queda el laboratorio, y después termina con una especie de área de servicio, que tiene detrás dos núcleos de ascensores. Ese edificio se terminará en abril, pero tendrá dos partes más”, detalló Moscato, quien resaltó que “tiene que ser un edificio que represente una medicina muy humana”.

Al igual que las obras realizadas en la Universidad de Lanús, las nuevas edificaciones de la Arturo Jauretche son posibles gracias al reciclaje y aprovechamiento de edificios existentes, que alguna vez fueron abandonados. Mientras que la UNLA supo convertir, de la mano de Moscato, los viejos talleres ferroviarios de la estación Remedios de Escalada en aulas y auditorios universitarios, el nuevo departamento de Ciencias de Salud de la UNAJ se hace posible gracias a la puesta en valor de un edificio de 1942, que era originalmente propiedad de YPF y que quedó abandonado tras la privatización de la empresa petrolera en la década de 1990.

– ¿Si le dieran a elegir, preferiría reciclar un edificio o construirlo desde cero?

– Yo creo que es mejor aprovechar lo que existe porque es una lección cultural. Vos le estás diciendo a la sociedad que lo que existe puede ser usado y puede ser reconvertido. Y que las cosas, al fin y al cabo, no son tan originales. ¿Qué lógica tiene destruir? ¿O no aprovechar? Ninguna. La verdad que no tiene sentido. Yo creo que es bueno recuperar. La historia hace a los edificios más interesantes.

“Tenemos que proyectar futuro y yo trato siempre que el edificio genere eso: que un chico entienda, al entrar en la universidad, que la universidad lo que hace es producción de cultura y que esa producción de cultura se refleja en el lenguaje”.

– ¿Qué diferencias arquitectónicas hay entre la UNLA y la UNAJ?

– Las universidades creadas en la década del noventa, en general, tenían como gran programa el ‘reciclaje’ de la población. Lanús había quedado destruida por la transformación industrial, que había cerrado sus fábricas por la crisis, y la universidad se planteaba las carreras que su población necesitaba. En muchos casos, había una cosa que se llamaba Ciclos de Complementación Cultural (CCC), que eran por ejemplo para que un tipo que había estudiado algunos años en la universidad y había tenido que abandonarla pudiera terminar una carrera y tener un trabajo mejor. En cambio, las de 2010, que se hacen durante el kirchnerismo, el tema es el desarrollo económico. Todas las universidades que nacen en el 2010 se plantean a la Argentina como nuevo país industrial. Por eso la Jauretche tiene como carreras estrella Ingeniería y Medicina. Porque el plan no solo es de salvación social, sino de desarrollo. El planteo ahí es que la Argentina deje de ser un país que anda a la deriva y pase a transformarse en un país industrial.

– ¿Estas diferencias aparecen estéticamente en la arquitectura de los edificios?

– Quizá sea una exageración, pero yo digo que las universidades del reciclaje eran de ladrillo y las nuevas tienen que ser blancas. Tenemos que proyectar futuro y yo trato siempre que el edificio genere eso: que un chico entienda, al entrar en la universidad, que la universidad lo que hace es producción de cultura y que esa producción de cultura se refleja en el lenguaje. Por eso, manejo ciertos códigos de transparencia, como el laboratorio de la Jauretche, que tiene una faja de vidrio arriba, que desmaterializa el edificio. Vos ves el paisaje a través del vidrio y decís ‘Qué maravilla que los edificios empiezan a tener todos los elementos de la cultura contemporánea’.

– ¿Qué piensa de la arquitectura argentina de los últimos años?

– Por un lado, que últimamente la mejor arquitectura que se ha hecho en Argentina son las universidades nuevas, que en general son todas buenas, acompañadas de los edificios en propiedad horizontal hechos por jóvenes arquitectos dentro de la ciudad, manejando recursos escasos. Y, por otro lado, que lo que no ha funcionado en los últimos años es la arquitectura de grandes torres, de grandes edificios, que se han transformado en algo banal, que no dicen nada y que no tienen mucha importancia. Esa no es buena arquitectura porque esos edificios no han podido saltar de los sistemas de representación social. En cambio, sí lo pudo hacer un joven arquitecto que hizo cuatro departamentos en un barrio, que les puso terrazas que están buenas, y que los pintó de blanco porque quedaba más lindo. Sin duda, es mucho mejor la arquitectura dentro de la ciudad que la de los bordes de las periferias ricas. Vos vas a un country y de 100 casas son poquitas las que te gustan.

– ¿Cómo se ve reflejada esa representación social en las obras arquitectónicas?

– Cuando ves un edificio, el edificio quiere decirte algo. La imagen representa valores permanentes de la cultura y de la sociedad. Cuando yo veo las cosas que hacemos y los edificios que hacemos está claro que esos edificios están representando un sistema de valores. Cuando ese sistema es legítimo, la arquitectura es buena. Si es falso, también es falsa la arquitectura porque carece de importancia. Es como si te estuviera mintiendo. La belleza, dice San Agustín, tiene que ver con la verdad. Y si la belleza tiene que ver con la verdad, la arquitectura que pretende figurar siempre da a floja. En cambio, la arquitectura que da respuesta, que hace aulas y son aulas que están bien aventanadas, y que resuelve esto y resuelve lo otro, uno termina diciendo ‘che, qué bien que está esto’.

El render del nuevo edificio del Instituto de Ciencias de la Salud de la UNAJ.

– ¿Y qué sucede en el conurbano: hay una identidad propia?

– El conurbano es una cultura, y una muy fuerte. En ese sentido, el libro de (Pedro) Saborido lo marca muy claro: la cultura del conurbano te impregna al igual que la cultura del rock, que es una cultura urbana muy especial y muy valiosa, que resume los problemas de la pobreza y del trabajo. A diferencia de lo que algunos piensan, el conurbano no es una zona disminuida culturalmente. Tiene culturalmente la potencia de la periferia y, en ese sentido, el discurso sobre la periferia siempre ha impactado. El conurbano, que nace como una capital en disminución, por su propia potencia se transforma en el elemento más importante. Hoy se podría decir que la humanidad tiene una situación donde son las periferias las que empiezan a determinar la existencia, determinando la cultura y los sistemas de valores.

– ¿Cómo relaciona al peronismo con el diseño de las nuevas universidades?

– El peronismo es el partido que construye la modernidad en Argentina, la modernidad para todos. Y las universidades tienen que ser la modernidad. No pueden ser una arquitectura más o menos, tienen que ser muy buenas. Cuando Perón hizo, por ejemplo, el pulqui, o el avión de caza, estaba pensando en un país moderno, no estaba pensando en esta imagen de escasez y pobreza. Entonces, tenemos que construirlo de nuevo. Tenemos que agarrar y decir ‘bueno, vamos a hacer la mejor arquitectura en los edificios públicos’, y esto está bien. Creo que es algo fantástico.

Entre el exilio y el reconocimiento

El pasado 12 de agosto, durante el bicentenario de la Universidad de Buenos Aires, el arquitecto y docente graduado de la FADU recibió un premio UBA, destinado para conmemorar a 200 personalidades importantes de la casa de estudios. Honrado por el reconocimiento, aseguró que se trató de “un hecho muy emocionante” debido a las circunstancias de la pandemia y consideró que “es muy importante que la universidad se celebre a sí misma, ya que, dentro del sistema público, es lo más reconocido”.

Por otro lado, luego de rememorar su juventud de militancia y los tiempos de exilio durante la última dictadura militar, aseguró que ningún reconocimiento se compara con el recuerdo de la lucha y el regalo de la vida. “En lista de desaparecidos de la Facultad de Arquitectura hay 150 tipos, pero hay 20 que eran amigos míos directos. Es arrasador ese hecho y uno da gracias a Dios por haberse salvado y también por poder dar testimonio de una cosa que sucedió. Nuestra generación pensó en un país mejor. Por ahí no se dio, pero siempre es una esperanza. Un filósofo francés dice que el paraíso es, además de una promesa, un recuerdo de la humanidad. Para nuestra generación, el paraíso existió: fuimos nosotros en los años setenta.

Falleció Daniel Silberfaden, decano de la Facultad de Arquitectura de la UP

Fuente: Clarín ~ Fue uno de los grandes impulsores y fundadores de la carrera en la Universidad de Palermo, entre otros importantes cargos.

«Me cuesta pensar en volver a realizar proyectos en los que no comparta con otras personas las ideas. Hoy tengo mi estudio y soy su único titular pero, tengo algunos colaboradores y trato que aporten sus ideas, que sientan que lo que hacemos es un poco o mucho, una idea de todos. Busco trabajar con personas que me enriquezcan como ser humano«.

Este testimonio, que dio Daniel Silberfaden a la revista ARQA hace unos años, explica el cariño y la admiración con la que sus colegas lo despidieron tras conocer la noticia de su fallecimiento. El prestigioso arquitecto sufrió un paro cardíaco este 29 de octubre.

Trayectoria

Silberfaden nació el 19 de noviembre de 1954. Egresó de la Universidad de Buenos Aires en 1979 y era un profesional con múltiples actividades.

Casa Ombú, de Daniel Silberfaden y Jens Wolter.
Casa Ombú, de Daniel Silberfaden y Jens Wolter.

Hasta su partida, fue el decano de la carrera de Arquitectura de la Universidad de Palermo, de la que fue su fundador, consejero del Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo porteño (CPAU), miembro de la Academia de Arquitectura y Urbanismo (ACAU) y titular de su propio estudio. Antes, entre 2004 y 2010, fue presidente de la Sociedad Central de Arquitectos (SCA).

Además, fue miembro del Consejo Académico de la UBA y se desempeñó como curador designado por la Cancillería Argentina de las bienales de Venecia, San Pablo y Londres. También fue profesor invitado de la Universidad Politécnica de Cataluña, la Universidad Méndez Pelayo de Valencia y la Washington University de St. Louis, entre otras institucionales locales e internacionales.

Su pensamiento​

«Cada trabajo es una nueva experiencia donde ponemos todo lo aprendido, aquellas cosas que probamos y que nos interesaron más que otras», afirmaba en la misma entrevista.

Proyecto de Torre en Asunción, Paraguay.
Proyecto de Torre en Asunción, Paraguay.

Y luego agregó: «Sin embargo, siempre es una nueva experiencia, aparecen temas que nunca nos planteamos y dedicamos parte de nuestro tiempo para preguntarnos: ¿qué más podemos hacer? ¿qué cosas podemos mejorar de aquellas que intentamos y cuyos resultados por varios motivos no nos gustaron? Trabajar con mucha honestidad y un poco de humor, que hace falta y mucho en este oficio«.

Para Silberfaden el ejercicio de la profesión va de la mano con trabajar en las cualidades que nos hacen más solidarios, más humanos. «Busco ser mejor arquitecto, es decir, entre otras cosas, mejor tipo y ser un tanto más feliz con las cosas que hago».

En cada uno de sus trabajos se sentía parte de un equipo y era una circunstancia que valoraba. «Entre otras cosas maravillosas, estar rodeado de personas tan especiales, tan dedicadas tantas horas a cosas tan diversas… compartir con ellos un poco de todo este tiempo que les toca vivir me sirve, me enriquece, y agradezco profundamente las oportunidades que fui teniendo«, destacaba. 

Tenía una profunda preocupación por el deterioro en las condiciones de vida en nuestro país y reflexionaba sobre posibles soluciones al déficit habitacional al punto que creía que debía existir una especie de «Hospital de Arquitectura» al que una persona sin recursos pudiera dirigirse para recibir asesoramiento profesional.

«Tenemos mucho que hacer, mucho que aprender, mucho que decidir. En mi caso hacer arquitectura, enseñar todo lo que hago y posiblemente haga. Todo tiene un mismo fin, que le dejo a mis hijos y a los hijos de mis hijos«, aseguraba.

Para muchos de sus colegas que fueron sorprendidos con la noticia, se fue inexplicablemente demasiado temprano.  Dejando esos vacíos tan difíciles de llenar.

De Mendoza a Londres, dos argentinos que hacen arquitectura de vanguardia

Fuente: Clarín ~ Valentina Cerrone y Sebastián Andía trabajan en Zaha Hadid Architects y tienen su propio estudio en Inglaterra.

Dos jóvenes arquitectos mendocinos, Sebastián Andía y Valentina Cerrone, son los creadores de OF, un estudio que fundaron en 2017 en Londres, a la par de su trabajo en la oficina de Zaha Hadid.

En Salónica, Grecia, el sol se descompone en millones de micropartículas de luz, apenas choca con la piel color plata de diez torres futuristas, Oculis, que albergarán al centro de negocios de la ciudad. Buena parte de los planos se dibujaron bajo un cielo menos despejado, justamente en la oficina de OF. Studio, cuyos arquitectos están habituados a otros soles, menos marítimos y más andinos., 

Los dos se asoman en una video conferencia que, + 4 horas, da la medianoche en Londres. “Estamos acostumbrados a trabajar a cualquier hora”, dicen. Su carpeta de proyectos lo confirma; ganaron concursos en Dubai, Estados Unidos, Grecia y Mendoza. Mientras trabajan con equipos de todo el mundo, sus apps suman millas en husos horarios.

Andía y Cerrone tienen a su cargo la puesta en valor del Palacio Zapata, en Mendoza.
Andía y Cerrone tienen a su cargo la puesta en valor del Palacio Zapata, en Mendoza.

Con unos años de diferencia recorrieron el mismo camino. Se graduaron en la Universidad de Mendoza y realizaron el Master en Arquitectura por el Architectural Association Design Research Lab (AADRL) de Londres.

Ambos se graduaron con honores en la especialización y terminaron trabajando en Zaha Hadid Architects. Hoy persiguen sus sueños en OF. y comparten el trabajo en la firma de la ganadora del Pritzker, donde Sebastián tiene el cargo de asociado. 

Sebastián es sobrino de Gerardo Andía, el gran arquitecto mendocino.
Sebastián es sobrino de Gerardo Andía, el gran arquitecto mendocino.

“En Hadid formamos parte de obras de gran envergadura muy de vanguardia, una experiencia valiosísima. A través de OF., nos planteamos qué nos gustaría hacer nosotros como individuos con esas herramientas”, cuenta Cerrone.

Las respuestas llegaron rápido. En 2020 ganaron, entre más de 150 estudios emergentes, el concurso para proyectar un ícono urbano en el Dubai Creek Harbour, de Emiratos Árabes Unidos.

Le pusieron Land-Mark, un juego de palabras entre ícono y marca en la tierra (en inglés). De hecho, el proyecto integra los símbolos del desierto en curvas que parecen talladas en el piso.

El desafío era grande: teníamos que generar un ícono de la ciudad a menos de 1 kilómetro de una obra de Calatrava de muchísima personalidad”, dispara Andía. Land-Mark genera en sí mismo distintos paisajes, protagonizados por espejos de agua que convergen en la bahía. Cada oasis está contenido en paredes que recuerdan, en textura y color, las arenas árabes.

La tecnología constructiva también apela a la vanguardia: brazos robóticos para colocar las paredes realizadas en hormigón de color impreso en 3D. “Cada una de esas geometrías origina espacios pensados para ser aprovechados al máximo”, completa Cerrone.

Valentina Cerrone se recibió de arquitecta en Mendoza e hizo un máster en Londres.
Valentina Cerrone se recibió de arquitecta en Mendoza e hizo un máster en Londres.

Clave arquitectónica

La preocupación sustentable vuelve a estar presente en las Ephemeral Station, un prototipo de estaciones colectoras de energía desarrollado para Play Ranch, Estados Unidos. Trasladable, está pensado para recolectar agua y energía y proveerla en eventos remotos, como recitales.

“Lo creamos como un elemento escultórico, que aporte belleza al lugar donde se instale. Fue un proyecto muy interesante, porque llevó una investigación en áreas que quizás como arquitectos no nos son demasiado cercanas”, agrega Andía. Para realizarlo recurrieron al asesoramiento del ingeniero mendocino Alfredo Estévez.

Ephemeral Station, prototipo de estaciones colectoras de energía en los Estados Unidos.
Ephemeral Station, prototipo de estaciones colectoras de energía en los Estados Unidos.

En el caso de Oculis también generaron una alianza, esta vez con el estudio griego Degree Zero. Bajo la premisa de dejarle valor a la ciudad, instalaron torres sobre un podio público, que recupera la esencia de los pueblos griegos, la idea de mercado, de callecitas pequeñas y de un clima que empuja a la gente a vivir los espacios exteriores.

Oculis, diez torres futuristas en Salónica.
Oculis, diez torres futuristas en Salónica.

La vuelta a casa

Hace 20 años que Andía reside en Inglaterra, antes vivió en Nueva York donde trabajó para la oficina de Asymptote. Cerrone lleva menos de la mitad, pero ninguno de los dos dejó del todo Mendoza.

Sebastián es hijo de Carlos F. Andía y sobrino de Gerardo Andía, el arquitecto mendocino más importante de la segunda mitad del siglo XX. Junto con su padre y su hermana Jimena, hoy titulares de Andía Arquitectos, proyectó el edificio de Investigación y Posgrado de la UTN en su provincia.

Ecowine Lodge, en Tupungato, una de las obras de Of. Studio.
Ecowine Lodge, en Tupungato, una de las obras de Of. Studio.

Aunque su dominio diga UK, OF. es, en esencia, mendocino. El estudio recibió la comisión de proyectar la puesta en valor del Palacio Zapata, un edificio histórico de la capital provincial.

Para ello diseñaron una envolvente llena de curvas, que recrea un clásico de las viviendas cuyanas: el patio. “La geometría logra terrazas y va delimitando lo público y lo privado. Y garantiza la vista a los cerros desde cada unidad”, explica Cerrone.

valentina cerrone sebastian andia arquitectos argentinos radicados en londres creadores del  of estudio
valentina cerrone sebastian andia arquitectos argentinos radicados en londres creadores del of estudio

El paisaje también es parte fundamental de Ecowine Lodge, un hospedaje turístico ecológico en Tupungato. “La idea fue minimizar el impacto ambiental desde los materiales y las tecnologías constructivas, pero también desde la composición.

Planteamos elementos abstractos integrados a las formas del Valle de Uco, biopiscinas, hormigón apisonado, paneles solares y huertas”, apunta Andía. El resultado: una geometría de capas superpuestas color terracota, que se funde con los Andes. El punto donde todo comenzó.

Una arquitectura más allá de los ladrillos: la propuesta de Nidia Marinaro de Livingston

Fuente: Filo News ~ Nidia Marinaro de Livingston es una arquitecta, docente y urbanista especializada en Políticas Públicas de la UBA y lidera en Buenos Aires el Estudio Livingston con Arquitectos de Familia. Su eje principal es pensar la arquitectura con un rol social más allá de la construcción priorizando el trato con las personas. En diálogo con Google y Filo.News habló de cómo es el método que proponen, cómo trabajan y cuál es el rol de la mujer hoy en la profesión.

La importancia de escuchar, de convertir un lugar de acuerdo a las necesidades y gustos de cada integrante de una familia, priorizar los espacios verdes y realizar una obra con un sentido social más allá de los ladrillos, de eso se trata Arquitectos de Familia, la agrupación del Estudio Livingston que lidera la arquitecta y urbanista Nidia Marinaro de Livingston.

Redefinir la práctica de la arquitectura y repensarla a través del “Método de Familia” es lo que llevó al Estudio Livingston a que hoy esta disciplina haya obtenido también un nivel académico, ya que se enseña en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Buenos Aires, además de recibir premios en Estambul y Bruselas por su iniciativa.

Cuando Nidia comenzó la facultad de arquitectura se encontró con que esa casa de estudios había sido también fundada por Rodolfo Livingston, el reconocido arquitecto y personalidad destacada de la cultura por su labor. Hoy, Rodolfo, es el compañero de vida de Nidia con quien formaron una familia y tienen un hijo. Él, fue quien ideó y creó el método de Arquitectos de Familia y, juntos, unieron sus pasiones. 

“Somos más que proyectistas, más que diseñadores de casas, somos y nos sentimos un enlace entre la familia y la casa deseada. Cuando digo somos, es porque somos los arquitectos de Familia y yo soy una de ellas”, dijo Nidia acerca de su pasión.

Respecto a ser la compañera de Rodolfo, y lo que significa eso para la mirada ajena, ya que ambos realizan su trabajo en conjunto, Nidia comentó: “Siento que puedo ver lo que él construyó y sobre lo que él construyó puedo proyectar hacia adelante. Yo tomo eso y me proyecto. Nunca sentí ni tuve la sensación de estar bajo la sombra de una persona a la que admiro mucho y que ha sido docente fundador de la facultad donde yo me formé, es decir que yo tengo una gran admiración por Rodolfo. Puedo entender claramente lo que él puede aportarme y a partir de ahí me siento con la fuerza y el poder, y sé que tengo las actitudes que hacen posible la expansión distinta y eso lo que yo vengo a aportar. Siento que sumo, no me ha dejado inmóvil, no me ha condicionado esa mirada que en algún momento podría tener alguien de afuera pensando ‘es la mujer de’. Yo creo que con el hacer y la fuerza de mi trabajo claramente se pone en evidencia lo que vengo a sumar”.

Nidia Marinaro y su esposo el arquitecto Rodolfo Livingston.

Un método que tiene a la familia como lugar central

“Arquitectos de Familia” es una aproximación humana, solidaria y social, elucubrada y llevada a la práctica. Los deseos arquitectónicos no dejan de lado la necesidad de construir un espacio para habitarlo y encontrar el sentido de un hogar más que de la mera construcción de una casa.

Las casas no son iguales, las familias tampoco. Pensar antes de construir, ese es el leitmotiv del Estudio Livingston.

“Las ciudades han sido pensadas por hombres, porque de hecho la mayor cantidad de las instituciones rectoras están dirigidas por hombres: la Asociación de arquitectos o la facultad por ejemplo. Por otro lado, la ciudad del cuidado y la que produce todo lo que caracteriza a lo femenino no está incluida en el proyecto de ciudad. Es decir, la ciudad no es empática, es bastante difícil que la ciudad proponga desde lo arquitectónico y urbanístico un espacio solidario. Es decir que hay que ir a buscarlo porque no propone el encuentro, la escucha, lo natural. En las ciudades prevalece lo construido y esto es bastante masculino: el cemento o el hierro que desde un punto de vista implica una acción y un resultado”, se refirió Nidia sobre la falta de “pensar” una ciudad y también los hogares con la perspectiva que trabajan en su estudio.

Mujeres arquitectas: un reconocimiento que todavía no llega en un mundo masculino

De acuerdo al lugar que ocupan las mujeres en la arquitectura, Nidia fue explícita: “En la arquitectura y en la construcción el principal obstáculo son las reglas y que hay que cambiarlas desde el lugar de lo femenino, generar otro concepto de éxito y de resultado, con otra métrica. Pensar que la construcción puede desarrollarse positivamente con actitudes femeninas sería un logro maravilloso, es un debate que podríamos plantearlo en el ámbito del mundo empresarial de la construcción. La innovación que podría producirse de la mano de la mujer, desde el punto de vista tecnológico es muy interesante, porque la mujer tiene una aproximación sobre las condiciones de confort y de generar elementos con materiales naturales, procesos más eficientes en la producción a diferencia del hombre, que le resulta más difícil porque está midiendo el resultado del proceso: que sea rápido, se construya más y a menor precio. Son dos visiones distintas, creo que hay que proponer el debate, es algo que yo misma pienso y siento como algo que me tienta a hacer y creo que eso sería transformador”.

Arquitectos de Familia. Foto gentileza de Nidia Marinaro de Livingston.

Sin embargo, como en la mayoría de los ámbitos de la vida y profesiones (lamentablemente) hay etiquetas que no representan a casi nadie, pero que se siguen colocando y están instaladas desde hace tiempo: “Los varones suelen ser tildados de afeminados porque no pudieron o no les dio la energía para llegar a ser ingenieros y quedaron en el mundo de la arquitectura, pero cuando uno profundiza y ve los lugares que ocupan los hombres dentro de la carrera, en la mayoría de las cátedras por ejemplo y en las de diseño, donde la mujer podría desarrollar sus actitudes femeninas, están dirigidas por varones. La arquitectura está muy atravesada por el mundo de lo masculino».

Respecto a la cantidad de mujeres en la disciplina, la urbanista destaca que en los últimos años hay muchas más mujeres ocupando espacios pero no precisamente de poder: “La mujer arquitecta no tiene lugares de poder, de dirigir, no ocupa esos roles. En la facultad de arquitectura no tenemos decanas, tuvimos solo algunas pero es bastante difícil, la mayoría de los Jefes de Cátedra son hombres. En la historia no se estudian mujeres arquitectas”.

Además, recalcó que el ámbito de la construcción es un mundo muy masculinizado donde “hay muy pocas mujeres albañilas, es bastante difícil pensar en una mujer plomera por ejemplo. Es difícil trabajar en ese mundo porque implica el desarrollo y el despliegue de una energía extra para dirigir a un equipo de hombres”, indicó Marinaro.

En contexto de este tema, fue que citó a una colega oriunda de Córdoba a quien admira, Ana María Falú, una arquitecta argentina, académica y activista social por los derechos humanos y por los derechos de las mujeres, quien además comparte su visión de que las ciudades han sido pensadas por hombres.

Microcentro porteño postpandemia: ¿abandonado?

La pandemia por coronavirus arrasó al mundo y a las grandes ciudades. Rápidamente tuvimos que adaptarnos a nuevas rutinas y casi de forma obligada al trabajo remoto y virtual. Las consecuencias ya se vislumbran y los resabios del aislamiento y cuarentena no tardan en llegar.

Microcentro porteño postpandemia, vacío y sin un rumbo definido.

Gran parte de oficinas, locales comerciales y edificios del microcentro porteño hoy se encuentran abandonados como retrato de lo que alguna vez fue. «En un principio el microcentro se pensó aislado de todas las funciones vitales de la vida y solo se concentró en la función de city porteña, de centro administrativo, además de ser el centro histórico del país. Ahora apareció este centro desierto y la pregunta es ¿qué hacemos con este centro histórico? donde tenemos un montón de inversión urbana e infraestructura, muchos edificios de mucho valor y vacíos, entonces el debate está en cómo revitalizar, dónde poner el eje de la historia si en el presente o en el futuro», explicó la arquitecta.

Proyectos inmobiliarios multimillonarios: ¿para quiénes?

La problemática actual sobre las construcciones de proyectos inmobiliarios millonarios tanto en la costanera norte de la Ciudad de Buenos Aires (Costa Salguero) y en la costanera sur (ex Ciudad deportiva de Boca Juniors), el impacto de estas edificaciones y sobre qué sector privilegiado podrá tener acceso, es uno de los debates que se mantienen en la agenda actual. 

La cuestión resulta polémica cuando en la Ciudad de Buenos Aires hay un problema habitacional donde el 30% de la población alquila o no puede acceder a una vivienda propia. Además de esto, se suma el impacto ambiental y la reducción de espacios verdes. 

Sobre esto, Nidia expresó: “La Ciudad se fundó en base a la costa. El Río de La Plata fue un pretexto para fundar la Ciudad de Buenos Aires y la ciudad se desarrolló de espalda al río. Antes de las construcciones, tenía una riqueza topográfica y geográfica que la mayoría de los porteños desconocen. Esta posibilidad de integrar la naturaleza y la tecnología y prepararnos para un futuro con el pasado, requiere de actitudes muy femeninas que implica ponerle un límite a la masculinización de la ciudad”. 

En esta línea, continuó desarrollando: “Estos grandes edificios serían una propuesta maravillosa si supiéramos para quiénes serían, no estamos en contra del desarrollo tecnológico, en el desarrollo de la ciudad y de grandes edificios, lo que pensamos es que tenemos que tener claridad para qué están haciendo esto, si lo están haciendo como una caja de inversión, no es bueno para nadie. Ambientalmente es horrible. Creo que hoy la Ciudad tiene la misma cantidad de personas desde 1950, tiene 3 millones de habitantes y cada vez se construye más, se demuelen casas preciosas para más y más y hay muchísimos edificios vacíos en casi todos los barrios. Construir grandes edificios tapando la costa urbana es un sin sentido, es crecer sin un orden, sin un para qué”.

De acuerdo al impacto ambiental agregó: “La arquitectura es todo el espacio construido donde habitamos, es el ambiente humano actual y lamentablemente hoy como está planteada desconoce una cuestión sustancial: el ambiente es el sustento y está siendo desconocido. Nosotros desconocemos la costa urbana, el paisaje natural de la ciudad», indicó.
 

Hacia el cierre de la nota, Nidia no escatimó en decir cada vez que pudo que la arquitectura tiene que estar al servicio de la gente, para darle comodidad y hacerla más feliz, no para ser meramente un negocio. Es por eso que impulsa y motiva a que las mujeres puedan involucrarse cada vez más, generando impactos positivos en la disciplina, necesarios para la inclusión e igualdad.

Fue así que la mujer innovadora del mes de la Arquitectura, se animó a dejar un mensaje de aliento para las nuevas generaciones: «La pasión por la arquitectura es algo que se tiene, que también se puede ganar pero la carrera es bastante dura y no debemos abandonar todo lo que constituye nuestro potencial, todo lo que traemos y tenemos para transformar este mundo. A la mujer a la joven estudiante le diría que explore al máximo todas nuestras características: la escucha, la empatía, generar el encuentro, la participación e ir construyendo en las materias los enfoques. Después, durante la carrera, en los espacios que les toque ir generando y preparando un cambio, porque tenemos que cambiar este mundo tan masculino», finalizó.