Fuente: Télam ~ La cartera que conduce Gabriel Katopodis creó en agosto de 2021 el Programa de Infraestructura del Cuidado, acompañado del compromiso de un piso de inversión del 8,5% de su presupuesto anual en dicha infraestructura. El objetivo es reducir las brechas de género, infancias, juventudes y personas mayores.
La inversión del Ministerio de Obras Públicas en 679 proyectos de infraestructura del cuidado alcanzó entre 2021 y julio de 2022 a casi $ 21.000 millones, en un proceso inédito para la obra pública argentina, con el objetivo de reducir las brechas de género, infancias, juventudes y personas mayores.
La cartera que conduce Gabriel Katopodis creó en agosto de 2021 el Programa de Infraestructura del Cuidado, acompañado del compromiso de un piso de inversión del 8,5% de su presupuesto anual en dicha infraestructura. Ese piso se superó ya en 2021, con un 10,4% devengado del presupuesto del Ministerio, equivalente a $ 13.223,1 millones; y en el primer semestre de este año, alcanzó a 12,7% y $ 7.671,7 millones, respectivamente.
Por otro lado, el Programa avanza en una política de participación, control ciudadano y transparencia para mejorar y amplificar su impacto.
La infraestructura del cuidado es entendida como aquella infraestructura destinada a garantizar el derecho y las condiciones necesarias de quienes reciben y brindan cuidados para reducir brechas de desigualdad, como las de género, generacional, discapacidad y territorial.
«El Ministerio decidió avanzar no solo en una agenda de obras cuantitativas, sino también cualitativa que tenga que ver con este eje innovador en gestión que es la infraestructura del cuidado, que es algo que no hace clásicamente la obra pública en Argentina, que está más pensada para obras de agua, cloacas, saneamiento y viales«, explicó a Télam, la directora nacional de Transparencia, Roxana Mazzola.
Destacó que «es una priorización dentro de esa agenda de políticas públicas que tenga que ver con reducir brechas de género y de infancias y juventudes, y para personas mayores, a través de la inversión necesaria en obra pública».
Además subrayó que «toda esta política se acompaña con un código de ética que incluya el principio de diversidad e inclusión, y con los pliegos (de licitación de obra pública) con perspectiva de género».
«Este es un proceso innovador con una mirada innovadora dentro de la obra pública. Siempre la obra pública fue ciega al género y a cuestiones ligadas a la infancia y las juventudes. Siempre se mira más las brechas territoriales, pero no estos aspectos. Es un componente innovador», afirmó Mazzola.
La funcionaria puntualizó que «Argentina viene de un proceso en el que hubo una fuerte desinversión en infraestructura del cuidado en los últimos años», y remarcó que «otra vez se vuelve a tomar la delantera en obra pública, pero esa inversión debe considerar las desigualdades. No es cuestión solo de invertir, sino de ver en qué se invierte».
De acuerdo a las cifras oficiales, a julio de 2022 se encuentran vigentes 679 desarrollos de infraestructura del cuidado, correspondientes a 474 obras y 205 proyectos.
Entre ellos, se destacan 186 obras y 13 proyectos de infraestructura sanitaria en hospitales, centros de salud, hospitales modulares de emergencia (HME), y centros modulares sanitarios (CMS), centros de aislamiento sanitario (CAS) y centros modulares sanitarios de frontera.
Además, hay otras 233 obras y 181 proyectos de centros de desarrollo infantil (CDI) que se constituyen en espacios de acompañamiento, educación, promoción y protección de los derechos de las infancias.
A estos se suman, 4 obras y 3 proyectos de centros territoriales integrales de políticas de género y diversidad que buscan fortalecer el modelo de abordaje integral de las violencias de género; y espacios para las Juventudes que buscan ampliar infraestructura de calidad en el ámbito público dirigida a las juventudes, impulsando la implementación de políticas de carácter integral que promuevan la inclusión y el desarrollo de esta población.
Acá se incluyen casas de día para jóvenes y escuelas técnicas de educación profesional secundaria que, por el momento, se encuentran en estado de proyecto.
Por último, hay 51 obras y 8 proyectos que responden a la definición de infraestructura del cuidado pero que se ejecutan bajo otros programas del Ministerio, como el Plan Argentina Hace, Infraestructura Patrimonial y el Plan Federal de Obras de Arquitectura.
Si bien estas intervenciones no cubren la demanda potencial total en materia de infraestructura del cuidado, constituyen una base importante y muestran un cambio innovador y diferencial en la obra pública.
«La obra pública es central en el proceso de recuperación económica y en el desarrollo de los países ya que produce múltiples impactos en la economía, genera empleo directo e indirecto en distintos sectores, y contribuye a mejorar la calidad de vida de la población, incidiendo en la reducción de brechas de desigualdad», remarcó Mazzola.
Señaló que «la infraestructura del cuidado es una estrategia de equidad que impacta positivamente en la reducción de brechas, el desarrollo económico y la generación de empleo».
«Es también una respuesta estatal que reconoce al cuidado en su triple carácter de necesidad, trabajo y derecho, que cumple un rol socioeconómico fundamental y debe ser atendido mediante políticas públicas que fortalezcan, mejoren y amplíen la organización social del cuidado con el Estado como proveedor y garante», concluyó la funcionaria.