Fuente: Clarín ~ Un informe privado muestra qué está ocurriendo con el precio del metro cuadrado y destaca que aún es una buena oportunidad.
Aún con las oscilaciones de las variables económicas de la Argentina, el mantenimiento de la brecha cambiaria sigue siendo una buena oportunidad para construir, según opinan los desarrolladores. En especial, si se comparan los costos de las obras respecto de aquellas en las principales ciudades de la región.
Un estudio hecho por la empresa TBT Real Estate muestra que el costo de la construcción en Buenos Aires -a razón de US$ 550 el metro cuadrado (m2)- se encuentra en niveles históricamente bajos: prácticamente la mitad que en Montevideo, más barato que en Mexico, similar al de Bogotá y por encima de San Pablo y Santiago de Chile.
La comparación de estos costos para construir se hizo tomando como base un modelo de edificio, con datos propios de la constructora y estadísticas de las cámaras del rubro e índices oficiales de cada pais.
Se consideraron solamente los costos de mano de obra y materiales, con el valor del impuesto al valor agregado (IVA). No se incluyó ningún otro costo directo o indirecto que conforme el costo total por m2 vendible.
“La razón por la cual excluimos estos costos es que hay una gran disparidad en cada mercado, respecto a honorarios profesionales, gastos en permisos de construcción, beneficio pretendido, impuesto a la Ganancia, etcétera”, explica explica Santiago Levrio, gerente General de TBT Real Estate.
“Dado que el mercado inmobiliario latinoamericano no aloja en sus capitales gran cantidad de inversiones extranjeras (mucho menos en la Argentina), la mirada hacia la región nos puede dar un panorama sobre fenómenos estrictamente locales, parcialmente influenciados por la variación de los precios de los commodities”, dice.
El costo de la construcción en distintas ciudades de la región. Fuente: TBT Real Estate – Proyectos Emehome
Según Levrio, en el informe se observa que actualmente construir en Buenos Aires tiene un costo relativamente bajo en términos históricos, aún cuando los costos aumentaron un 50% en los últimos ocho meses. «En parte, porque los salarios en dólares en la Argentina están muy castigados y eso explica por qué el costo actual nuestro se acomodó al promedio de la región cuando usualmente solía estar por encima“, dice.
Y admite que «esta oportunidad es claramente para quienes tienen ahorros previamente atesorados”.
“Esos ahorros en dólares, no van a crecer. Quienes los tienen deben pensar que si esperan cada vez van a construir menos metros”, asegura el analista.
Los resultados de la comparación interregional son estrictamente coyunturales. Las conclusiones pueden ser muy distintas, en el caso argentino, según el período de análisis que se tome.
“Sin embargo, se puede apreciar claramente como un costo que venía siendo superior a la región en promedio, e inclusive cercano a Uruguay, ahora se encuentra dentro del promedio”, dice. Si se toma el costo en función del PIB per cápita, Buenos Aires se encuentra en el decil más barato de Latinoamérica, señala.
Históricamente, construir en Buenos Aires tenía un costo similar al de Montevideo y duplicaba el costo de San Pablo. “Actualmente, se está ubicando en un lugar que, siempre que lo hizo, permanece por poco tiempo. Por eso, este fenómeno entonces ilustra la oportunidad que aún persiste de construir en Argentina. a pesar de la suba de los costos en los últimos meses», reconoce el ejecutivo.
Desde finales del año pasado, pero marcadamente en 2021, el impacto de la suba de las materias primas afectó el costo de construir en toda la región, ya que incluso con la retracción salarial a nivel regional y las devaluaciones de las monedas, de todas formas, se elevó el costo de edificar.
Los costos de construcción en la región. Fuente: TBT Real Estate – Proyectos Emehome
Para dar una dimensión del incremento de las materias primas, una canasta de metales críticos para los insumos de construcción tuvo un incremento del 50% en dólares. Existen casos como el mineral de hierro, que tuvo un incremento interanual del 110%.
Según Levrio, la cuestión “vivienda” está siendo un tema relevante en toda la región. “Existen movimientos demográficos en todas los conglomerados urbanos latinoamericanos, por eso, la construcción es una de las primeras industrias en recuperarse. Esto hace prever que el costo en dólares de construir continúe incrementándose».
A favor del caso argentino, señala el desarrollador, “ese potencial incremento va a ser desde valores históricamente muy bajos, tanto en su propia serie, como en términos regionales”.
Precisamente para fomentar la actividad, el Gobierno lanzó el blanqueo de fondos destinados a la construcción de obras nuevas. Si bien ahora se analiza la posibilidad de prorrogarlo, los resultados hasta ahora no fueron los esperados.
Según Miguel Di Maggio, director de la inmobiliaria Depa, “al momento se registran unos 1.300 pedidos de ingreso al blanqueo mientras que las escrituras mensuales apenas rondan las 1200/1300. En este escenario de un mercado prácticamente desahuciado, la prórroga de la medida parecería un sinsentido”, comentó.
Según el empresario, “quedará en manos de los desarrolladores encontrar una propuesta superadora, alcanzable para los usuarios finales, y sostenible en el tiempo, en un contexto en el que no existe el crédito hipotecario ni siquiera para las unidades usadas. Se trata de un momento extremadamente crítico para el sector, más complejo aún que el escenario de 2001”, opinó.