Fuente: Economía Sustentable ~ Cuenta con aulas de computación, oficinas de investigación, laboratorios, biblioteca y salas con equipamiento multimedia, entre otros recursos.
El Gobierno nacional presentó el nuevo edificio ecológico de la Universidad de Buenos Aires (UBA), dentro del predio de la Ciudad Universitaria, el cual cuenta con aulas de computación, oficinas de investigación, laboratorios, biblioteca y salas con equipamiento multimedia, entre otros recursos. Cero más infinito, es el nombre de la majestuosa obra.
El edificio ecológico cuenta con 8.700 m² de techo verde y luz natural en todos sus ambientes. Su objetivo es favorecer la integración e interacción de diferentes áreas del conocimiento, la docencia y la investigación.
En Cero más infinito va a funcionar el Departamento de Computación, el Departamento de Ciencias de la Atmósfera y los Océanos, el Instituto de Cálculo, el Instituto de Ciencias de la Computación y el recién creado Centro Interinstitucional en Ciencia de Datos.
En el área perimetral externa de la planta baja está el sector de aulas. Las áreas restantes, establecidas alrededor de los dos patios, están destinadas a salas de reuniones, de servidores, bibliotecas, bares y áreas de lectura.
Además, dispone de 10 laboratorios de computación, con capacidad para 50 máquinas cada uno, 19 aulas de docencia con capacidad para 60 alumnos cada una con sillas o mesas móviles, adaptables a las diversas modalidades de enseñanza y 5 aulas de seminarios en forma de anfiteatro para cien personas cada una.
El ministro de Ciencia, Daniel Filmus, consideró: “Esta es para mí una emoción enorme, porque este proyecto me toca tanto en mi rol de Ministro como de docente de la UBA e investigador del CONICET”.
Agregó: “Este edificio es para el desarrollo de la ciencia y la tecnología, es para la producción de conocimiento, y es para generar los caminos para que ese conocimiento se transforme en mejoras en las condiciones de vida de nuestra gente”.
“Tanto para la ciencia y la tecnología como para el desarrollo del país no puede haber si no políticas de Estado. No hay ninguna solución a corto plazo, la ciencia y la tecnología exigen políticas estables que permitan que Argentina cambie su matriz de producción y genere las condiciones para un desarrollo soberano y autónomo”, concluyó.