Fuente: Cronista ~ A dos semanas de reglamentarse el blanqueo de capitales destinado a la construcción en obras nuevas o con un avance no mayor al 50%, los empresarios inmobiliarios, le piden al gobierno que el sinceramiento también se haga extensivo a los inmuebles usados. Además insisten con un abanico de medidas que buscan reactivar el mercado de bienes raíces.
La medida que fue reglamentada a fin de mes busca dinamizar la construcción. Con esta norma, el Gobierno espera sumar entre u$s 4000 millones y u$s 5000 millones a los apenas u$s 200 millones que fueron atraídos el año pasado hacia la Argentina durante los 120 días que duró el régimen en 2021.
Pero para los empresarios inmobiliarios la norma tiene gusto a poco. «Nosotros celebramos el blanqueo pero creemos que debería ser más amplio. No todos los desarrollos califican, el umbral es muy alto y quedan exentas las obras más pequeñas», explica Marta Liotto presidente del Colegio Profesional Inmobiliario porteño (Cucicba).
La semana pasada Cucicba envió un petitorio al ministro de Economía, Sergio Massa, con una serie de pedidos en cuanto al actual blanqueo. Por ahora, no recibieron respuesta del Gobierno.
Qué piden las inmobiliarias
Según el decreto de reglamentación 522/2022 publicado en el Boletín Oficial, el blanqueo de capitales para la construcción tendrá esta vez unos 90 días para que los empresarios puedan pagar apenas un 5% del costo de la penalización, una tasa que ascenderá al 10% pasado ese plazo y por tres meses más; y al 20%, luego, hasta medio año posterior al último vencimiento.
La normativa, estipula que la inversión debe destinarse a obras privadas nuevas, dentro de las que se consideran todas las que al momento de entrada en vigencia de la Ley tengan un avance inferior al 50% de la obra. «Además el umbral es alto, porque se trata de desarrollos premium, dejando afuera a muchos edificios pequeños que conforman el mercado», agrega Liotto.
En este aspecto, Liotto hace hincapié en que «debería incluir a todas las obras de la Ciudad de Buenos Aires para que no apunte solo a los desarrolladores más grandes».
Otro de los pedidos que encara Cucicba tiene que ver con las propiedades usadas. «Hoy el 80% de nuestro stock en venta, que es muy alto, es de inmuebles usados. Por eso pedimos que el blanqueo se puede destinar a la compra de este tipo de unidades», explica la presidente.
¿De qué se trata el plan? En principio de reflotar medidas que ya se implementaron en el pasado y a criterio de los inmobiliarios fueron exitosas. El principal item apunta a los Cedines, una práctica que impulsó Cristina Fernández de Kirchner en 2013 tras el cepo cambiario.
Los empresarios inmobiliarios piden que el blanqueo de capitales no se destine solo a la construcción, sino también a los inmuebles usados.
Lo que busca el colegio inmobiliario es que esta herramienta no sea solo destinada a la construcción, sino que se pueda utilizar para comprar propiedades usadas, terrenos, campos, construcción de nuevas viviendas, e incluso para refacciones. «Apuntamos que el blanqueo de capitales también incluya a los inmuebles usados y no solo a los departamentos de pozo«, destacó Litto.
Incentivos para inversores
Contra todos los pronósticos, la cantidad total de las escrituras de compraventa de inmuebles en julio registró una suba de 27,7% respecto al mismo mes de 2021, al sumar 3138 operaciones, lo que muestra una leve recuperación. Pero, para los especialistas, los incentivos. por parte del gobierno, son claves para mejorar el presente del mercado.
Entre los puntos clave que los matriculados le presentaron al gobierno se destaca un sistema de desgravación impositiva. «Apunta a que no se cobren impuestos para quienes compran un inmueble para locación. Es algo que venimos trabajando hace años pero por ahora sin éxito«, reconoce Liotto.
Los incentivos fiscales están dirigidos para los inversores que apuesten a ladrillos y vuelquen esa inversión al mercado locativo.
«Diversos factores -como la Ley de Alquileres y la situación macroeconómica- hicieron que el mercado de compraventa exhiba precios extremadamente bajos. Pero, para que esta situación realmente redunde en beneficio de las familias argentinas, es necesario que desde el Estado se arbitren todos los medios necesarios para que el sueño de la casa propia pueda volver a ser una realidad», finaliza.