Fuente: IProfesional – Como parte de su estrategia, la actual GCDI acaba de vender las acciones que controlaba en la sociedad encargada de desarrollar un barrio náutico en Tigre.
Tras haber presentado un balance semestral con fuertes pérdidas por más de $7.897 millones, contra una ganancia de $1.862 millones de igual período del 2023, la ex TGLT ahora desarrolladora inmobiliaria rebautizada como GCDI y reconvertida en constructora, decidió desprenderse de uno de sus principales activos.
Se trata del barrio privado, que la empresa controlada por el fondo Point Argentun Máster Fund, con 41,73% del capital y por IRSA con otro 27,82% del capital y un 30% flotando en el mercado de capitales, viene desarrollando en un importante predio ubicado en la localidad bonaerense de Tigre.
Ex TGLT abandona el real estate para convertirse en constructora
El emprendimiento es llevado a cabo por Marina del Río Luján, sociedad en la que GCDI controla el 49,99% del capital y el empresario Marcelo Gómez Prieto el restante 49,99%.
Se trata de un hombre de negocios que actualmente es vicepresidente de las empresas que conforman el Grupo SBS y cuenta con más de 30 años de experiencia en el mercado de capitales.
Inició su carrera como Gerente Comercial de Mildesa Banco de Inversión (hoy Banco Patagonia) y luego fundó Argenbur Sociedad de Bolsa S.A. y la compañía financiera Argemofin S.A.
Actualmente es miembro del Directorio de Aluar Aluminio Argentino SAIC y del Banco de Valores S.A y ahora se acaba de quedar con el control total de la sociedad que compartía con la desarrolladora inmobiliaria.
El comunicado que emitió GCDI, la ex TGLT.
Ex TGLG, en retirada
La operación fue anunciada mediante un comunicado enviado por GCDI a la Comisión Nacional de Valores (CNV), en donde se explica que «ha celebrado y ejecutado -en carácter de parte vendedora- un acuerdo de compraventa de acciones representativas del 50% del capital social y de los votos de Marina Río Luján (MRL), en cuya virtud la Sociedad transfirió las Acciones al otro accionista titular del restante 50% del capital social».
En este sentido, se resalta que la transacción se encuadra dentro del plan estratégico aprobado por el directorio de GCDI orientado a consolidarse definitivamente como una compañía de construcción de obras para terceros, retirándose así progresivamente de los proyectos de desarrollo de real estate de los activos considerados como no esenciales para el negocio.
De hecho, esta subsidiaria venía también acumulando pérdidas en su operatoria si se tiene en cuenta que en su último balance publicado al 31 de marzo pasado evidenció un rojo de casi $5.000 millones, además de presentar un capital de trabajo negativo de $4.665 millones y estar encuadrada en el Art. 206 de La Ley General de Sociedades N° 19.550, causal de reducción de capital, por tener pérdidas recurrentes.
En el propio cuadro de resultados, sus ejecutivos admiten que dicha situación «se viene repitiendo en los últimos años, generando pérdidas acumuladas que superan el 50% del capital más el 100% de las reservas».
Esto hizo que GCDI se viera obligada a absorber dichas pérdidas acumuladas, lo cual le afectó parcialmente el saldo existente en la cuenta «Ajuste de Capital» por $7.582 millones.
Barrio en «veremos»
Según consta en la nota enviada a la CNV, tanto GCDI como Gómez Prieto se encuentran en negociaciones para poder realizar los aportes suficientes para cumplir con los objetivos de la sociedad y poder finalizar las obras pendientes, permitiendo cumplir con los presupuestos y proyecciones que permitirán la recuperabilidad del proyecto urbanístico denominado «Venice».
En este sentido, la actividad principal de MRL es, precisamente, la de construcción y venta de todo tipo de inmuebles, y el desarrollo de este barrio marino que se encuentra dividido en diversas etapas que se desarrollarán a lo largo de varios años.
Actualmente se llevan a cabo obras viales y de infraestructura tanto dentro como fuera del predio de 30 hectáreas de las cuales 8 se encuentran urbanizadas y se destinarán a viviendas unifamiliares, edificios y oficinas comerciales, además de áreas comunes de esparcimiento y tránsito.
El Masterplan de Venice fue proyectado por los estudios Duany Plater-Zyberk & Company (Miami. EEUU) y Bodas, Miani, Anger Arquitectos (Buenos Aires).
El anteproyecto fue diseñado por el Estudio McCormack & Asociados y lo está ejecutando Obras y Sistemas S.R.L. a la fecha, se ha lanzado el 60% de la primera etapa «Las Rías», actualmente en construcción, que se compone de 457 departamentos, 552 cocheras, 42 amarras y 231 bauleras.
Capital negativo
En el 2021, la sociedad que ya en ese momento tenía un significativo capital de trabajo negativo, recibió por parte de su accionista Marcelo Gómez Prieto una línea de crédito de u$s4 millones que venció en el 2022 y no fue cancelada, por lo que se puede inferir que ese dinero sería parte del monto total de la transacción de traspaso accionario de Marinas del Río Luján que viene sufriendo dificultades para realizar los inventarios tanto de desarrollar los macrolotes, los bienes en construcción, las unidades de cocheras y amarras, producto del escenario económico del país.
De todos modos, sus ejecutivos estiman que el plan de ordenamiento comercial y financiero encarado en los últimos tiempos podrá revertir dicho contexto a partir de negociaciones que lleva adelante reflotar varios de sus proyectos; las renegociaciones por las Obligaciones Negociables (ON) Clase XVI y XVII; las ventas de activos ya realizadas y las que tiene en carpeta, además de la alta probabilidad de éxito de algunos proyectos de obras potenciales.
Además, su directorio estima que las negociaciones realizadas en los últimos meses; las nuevas ventas de activos esperadas; la alta probabilidad de éxito de algunos proyectos de obras potenciales y el positivo proceso de capitalización, le permitirán cancelar ciertos pasivos corrientes, recomponer el capital de trabajo y generar flujos de caja positivos, mitigando dichas incertidumbres.
«Todo esto, le permitirá a la sociedad continuar avanzando en el cumplimiento de los planes de negocios esperados», destaca el documento de GCDI en el cual también destaca que el nuevo nombre «marca la nueva etapa que comenzamos a construir sobre los cimientos más firmes que una compañía pueda tener: historia, solidez y confianza».