Fuente: Cronista ~ Con el foco puesto en el acuerdo con el FMI, los diputados postergan el tratamiento de la Ley de Alquileres. Hoy los propietarios deciden quitar sus inmuebles de la renta en busca de nuevas reglas que regulen al sector.
Las palabras se las lleva el viento. En noviembre, el presidente de la Cámara de diputados nacionales, Sergio Massa, se había comprometido a tratar ciertas modificaciones en la Ley de Alquileres. Lo cierto es que 2021 finalizó sin novedades y a pesar de la apertura del Congreso, su tratamiento aún está muy postergado. Eso se traduce en un stand by en nuevos contratos locativos y más prórrogas.
«Hoy la Ley de Alquileres no es una prioridad en el Congreso» por lo que «su tratamiento se sigue postergando como consecuencia de los debates sobre el acuerdo con el FMI«, cuenta a El Cronista, Marta Liotto presidente del Colegio de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires.
Según explica la empresaria inmobiliaria, hoy los propietarios se rehúsan a firmar nuevos contratos y se inclinan por dos opciones: quitan el inmueble del mercado locativo o por el contrario hacen prórrogas para evitar un nuevo acuerdo.PUBLICIDAD
«En un mercado que funciona con oferta y demanda, a mayor oferta precios más bajos», explica Liotto.
Es que la normativa, que está pronta a cumplir dos años desde su vigencia, establece contratos por tres años con actualizaciones anuales a través de un índice que emite el Banco Central que toma en cuenta la inflación y el incremento salarial.
«Es necesario y urgente avanzar en una reforma de la Ley de Alquileres que vuelva a brindar previsibilidad al sector o en la puesta en práctica de políticas (como los CEDIN) que ayudarían a revitalizar el mercado», remarca Liotto.
Según los datos del último índice de Zonaprop desde el 2019 a hoy se redujo un 25% la oferta de alquileres disponibles.
Cambios en la Ley de Alquileres
Para Federico López Castromil, de la inmobiliaria homónima, la principal complicación se da por que el gobierno «primero anuncia y después piensa en cómo implementarlo. Esto hace que la gente entre en pánico y afecta al mercado», explica.
«No se puede pedir la derogación de la normativa. Hay fallas técnicas y conceptuales sobre las que hay que abordar. Los cambios tienen que ser integrales», asegura el inmobiliario.
Y si bien las principales críticas recaen en dos artículos (contratos cada tres años e incrementos anuales), hay otros puntos que se debe modificar: «las garantías como están establecidas son imposibles de cumplir, es algo en lo que hay que trabajar», agrega.
Lo cierto es que la postergación del tratamiento de la Ley de Alquileres en el Congreso, es otro de los factores que genera incertidumbre en el mercado de real estate.
«Se suman las vivienda ociosas, la suspensión de desalojos, los precios de los alquileres congelados. Esto junto a la rentabilidad muy baja, hace que los propietarios le escapan a los alquileres y se inclinan hacia las ventas», finaliza López Castromil