Fuente: La Nación ~ Se trata de un nuevo proyecto en desarrollo urbano que combina la vivienda sustentable con la creación de una ciudad inteligente más ecológica.
El mundo atraviesa un cambio de paradigmas en el real estate, por los nuevos desafíos urbanos, el crecimiento de la población, la falta de viviendas y el impacto ecológico de las ciudades. Rooftop Villages es un nuevo paso en el desarrollo urbano que combina la vivienda sustentable con la creación de una ciudad inteligente más ecológica.
Se trata de un proyecto piloto que un equipo de arquitectos, urbanistas y una antropóloga desarrollan en la ciudad de Róterdam, en Holanda,. Consiste en una innovadora idea para afrontar la escasez de vivienda y los problemas ambientales: edificar pequeños vecindarios en las azoteas de los edificios.
Entre los desafíos que presentan las ciudades hoy en día están la gran cantidad de áreas impermeables, que causan inundaciones, la crisis climática y el aumento de la temperatura en las áreas urbanas, la creciente demanda de movilidad, que a su vez conduce a la contaminación del aire, la escasez de agua potable o la falta de vivienda en el centro de la ciudad. Estos pequeños conjuntos de viviendas instalados en la azoteas de los edificios apuntan a contribuir a resolver este tipo de problemas.
La innovación de los techos verdes
El proyecto toma como base los techos verdes o green roofs, que consisten en la cobertura parcial o total del techo de un edificio con vegetación, que crece en un sustrato de varias capas compuesto por un medio de cultivo (tierra u otros materiales), membranas impermeables y filtrantes, sistemas de irrigación y drenaje y barreras para contener las raíces.
Estos techos verdes contribuyen a limpiar el aire, refrescar los edificios y las ciudades, proporcionar hábitats ecológicos y proteger el agua. El problema para la implementación está en sus altos costos. En este sentido, los Rooftop Villages –llamados Dakdorpen, en holandés- se presentan como una solución a la falta de ingresos financieros antes mencionada.
Desde la firma Dakdorpen a cargo del proyecto señalan que al reverdecer los techos y al mismo tiempo reforzarlos, se pueden hacer habitables con casas compactas. ¿Cómo? Aprovechar los tejados planos de los edificios no ya para hacer una cubierta verde, sino un pequeño pueblo lleno de vegetación. Esta opción podría cambiar el modelo de negocio de las remodelaciones de techos y hacer que la incorporación de “techos verdes” sea financieramente atractiva.
Proyecto piloto
Uno de los problemas con los que choca este proyecto es que no todos los techos están preparados para soportar el peso de nuevas construcciones y, en algunos, es muy difícil garantizar un acceso seguro desde el interior del edificio. Sin embargo, el grupo ya ha encontrado una azotea que cumple con todos los requisitos: está en un céntrico edificio de oficinas y coworking llamado De Kroon, y en él se están llevando a cabo ya las pruebas piloto. Se espera que, dentro de unos meses, las primeras viviendas estén terminadas y listas para entrar a vivir.
El plan se está poniendo en marcha, en parte con la financiación de entidades como CityLab10, un fondo que aporta capital a las ideas más innovadoras para la ciudad.