Fuente: Ámbito ~ Según estiman desde el sector, la exteriorización de capitales para la compra de viviendas usadas podría generar «alrededor de 30.000» ventas en todo el país.
El 2022 cerró con números positivos para el sector inmobiliario, registrándose en la Ciudad de Buenos Aires la mayor cantidad de operaciones de compraventa desde 2018. Y las perspectivas para este año son alentadoras. Es que, más allá de que se espera que la tendencia continúe siendo alcista, el blanqueo lanzado por el Gobierno puede impulsar todavía más el sector.
El 13 de enero el Gobierno reglamentó el blanqueo de capitales para la compra de viviendas usadas, previsto en la Ley de Presupuesto 2023, a través del Decreto 18/2023. Así, quienes cuentan con dinero no declarado, pueden sincerarlo en la compra de inmuebles usados, y no sólo en la compra de unidades en construcción.
Esta medida fue bien recibida por el sector, y se proyecta un mayor impulso en el nivel de operaciones. “Desde el Colegio Profesional Inmobiliario (CPI) de la Ciudad creemos que es una noticia sumamente positiva para el mercado. La Reglamentación presentada por la AFIP presenta muy buenos parámetros a los que atenerse, y confiamos en que quienes tienen fondos para blanquear así lo entiendan”, señaló a Ámbito Marta Liotto, presidenta del CPI.
“Según nuestros cálculos, esta propuesta podrá generar alrededor de 30.000 operaciones en todo el país (sobre todo en la Ciudad de Buenos Aires). Esto implicará, ante todo, una mejora en la situación habitacional para muchísimas familias, como también oportunidades de trabajo para los profesionales inmobiliarios”, destacó Liotto, quien subrayó que comenzó ayer una campaña publicitaria en las redes para “informar sobre este beneficio e invitar a consultar sobre el tema en las inmobiliarias”.
Por su parte, Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA), resaltó el elevado nivel en escrituras que se registró en 2022 en la Ciudad de Buenos Aires y proyectó: “La tendencia es hacia arriba, tenemos optimismo. El blanqueo, además, le va a dar un impulso espectacular a las operaciones”.
En ese sentido, estimó que el 2023 “va a ser un buen año”. “Y esperamos que 2024, si vuelven los créditos hipotecarios, sea todavía mejor”, resaltó Bennazar, quien señaló también que hasta el momento se recibieron muchas consultas al respecto y que será importante la “comunicación”.
Jorge Toselli, de JT Inmobiliaria, coincidió que el nuevo blanqueo “impulsará” las operaciones, pero que es posible que comience a percibirse un incremento en las operaciones por esta vía “a fines de marzo”. “La gente que tiene plata en negro va a querer blanquear. Viene bien para traccionar un poco el mercado de los usados. Estimo que tendría que movilizar y agilizar las operaciones”, remarcó.
Hasta el 21 de febrero, las personas que ingresen en el blanqueo para comprar inmuebles usados pagarán una alícuota del 10% sobre el monto sincerado. Después de esa fecha, el porcentaje ascenderá a 20%. “Creo que tendría que mantenerse en 10% hasta que finalice, en 2024. Es una propuesta que debería realizarse, porque si se puede modificar eso, entraría mucha más gente al blanqueo”, explicó Toselli.
El especialista remarcó, además, que no considera que los precios de los inmuebles suban ante la posibilidad de mayores ventas por el blanqueo. “Si bien es una medida positiva, no creo que tire los precios para arriba. Porque, desde 2019 para ahora, los inmuebles cayeron en torno al 35%. Los precios se van a mantener. Hoy la oferta es muy amplia, y supera considerablemente a la demanda”.
Los números de 2022
De acuerdo a los datos difundidos recientemente por el Colegio de Escribanos porteño, la compraventa de inmuebles en la Ciudad de Buenos Aires totalizó en diciembre 4.253 operaciones, lo que representó un incremento del 25,7% interanual. Así, en todo el 2022, se realizaron 33.753 operaciones, que significaron un alza del 17,1% en comparación con el año anterior.
«Se cierra un año que en los números es el mejor desde 2018 y el mes de diciembre también fue el mejor mes en cuatro años», destacó el presidente del Colegio de Escribanos, Jorge De Bártolo. Para el titular del Colegio, el crecimiento registrado «es el reflejo de la lenta recuperación desde la prepandemia y todo lo que vivimos luego», aunque también advirtió que el desempeño «expresa también claramente que es un mercado sin crédito, porque de esas 33.753 operaciones, hay solo 1.441 hipotecas en el año».