Fuente: Cronista ~ Cucicba, el colegio de corredores porteños, se reunió con el equipo de Sergio Massa. Estiman que en 180 días habrá una nueva norma. Mientras tanto: se volverá a la de hace dos años: para los contratos que se firmen o renueven durante ese lapso se utilizará la que rigió hasta mediados de 2020.
Las inmobiliarias parecen estar más cerca de su objetivo. Luego que el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, llamó a discutir en el Congreso una nueva Ley de Alquileres, al advertir que «fracasó» la norma sancionada hace un año y medio, el Colegio de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires (Cucicba) se reunió con diferentes representantes del massismo, quienes le aseguraron que antes de fin de año se «suspende» la normativa que hoy rige al mercado locativo.
«La semana pasada nos reunimos con el equipo de Sergio Massa y no explicaron que en los próximos días se tratará un proyecto para ‘suspender’ la Ley de Alquileres por un periodo de seis meses», explicó Marta Liotto, presidente de Cucicba.
La propuesta busca es que, durante 180 días, los diferentes actores del sector se reunan para debatir una nueva ley que regule los alquileres. «No vamos a modificar la normativa existente: vamos a generar una nueva. Porque, claramente, la actual fracasó», explicó Liotto, quien, durante las próximas horas, será recibida por Massa para tratar los pormenores.
El Colegio impulsa la derogación de la -Ley de Alquileres, prácticamente, desde su sanción, en junio de 2020. De hecho, durante toda la campaña electoral, se reunieron con los principales candidatos -ahora, diputados electos-, para pedir modificaciones en la normativa actual.
¿Qué pasa con los contratos post suspensión?
«Lo que está impulsando Massa es que se suspenda la ley y no que se derogue. En ese caso, los contratos que se celebren durante el periodo que la normativa está suspendida se regirán por la ley anterior, la que rigió hasta 2020«, remarcó Liotto, durante un almuerzo de fin de año del Cucicba con periodistas.
Es decir, que los nuevos contratos de alquileres que se firmen en el primer semestre del año se harán por dos años y serán las partes quienes pacten cómo serán los incrementos.
Hay que recordar que la ley actual establece contratos por tres años y un índice que elabora el Banco Central para establecer la actualización de valores. El mismo se forma en partes iguales por las variaciones mensuales del Índice de Precios al Consumidor (IPC), del Indec, y la remuneración imponible promedio de los trabajadores estables (Ripte), del Ministerio de Trabajo.
Marcela Passo, la massista que, a partir del 10 de diciembre, volverá a ser diputada nacional tras dos años de impasse, le confirmó a El Cronista que el objetivo es hacer una «revisión integral» de la ley actual.
En ese aspecto, señaló que los «temas más candentes» que analizarán son cuatro: los plazos de los contratos, así como los ítems vinculados con la información de los contratos que se deben presentar ante la AFIP, las garantías y el ajuste en los contratos.
¿Suben los precios de los alquileres?
Desde el sector, aseguran que, al igual que ocurrió con la normativa en 2020, la incertidumbre sobre los cambios que se implementarán generará un parate en el sector, lo que provocará una disminución de la oferta y, por ende, una suba de los precios.
«Para nosotros, la decisión de suspender la ley actual tiene que ser ya: debería suceder esta semana y, luego, en seis meses tendríamos una nueva normativa. Duarante ese periodo, los precios no deberían subir: muchos van a querer celebrar los alquileres porque confían en la ley anterior», explicó Liotto.
Pero el temor de las inmobiliarias es que la suspensión no se concrete y la incertidumbre sobre una posible nueva ley genere mayores subas en los valores de los alquileres.
Según el último informe de Zonaprop, el alquiler de un departamento de dos ambientes en la ciudad se ubica en $ 45.350 por mes, 3,3% por encima de noviembre. En 11 meses de 2021, acumulan suba de 47,8%, levemente por encima de la inflación. En 2020, aumentaron más de 60%. La ley actual se sancionó a mediados de ese año, lo que hizo que muchos dueños decidieran sacar su propiedad del mercado. La oferta de inmuebles en alquiler, no obstante, sigue acotada: el volumen actual de avisos es 10% menor al de 2020 y 20% por debajo del de 2019.