Fuente: La Nación Con un 72% de los nuevos proyectos incorporando principios sustentables, estas viviendas optimizan el uso de recursos naturales, ofrecen eficiencia energética y contribuyen al ahorro económico y ambiental.
Entre sus múltiples beneficios la arquitectura sostenible puede convertirse en una gran aliada frente al impacto que la alta suba de tarifas de gas y de luz generaron en todos los hogares de Argentina. Ello es así porque las viviendas construidas de esta manera, reducen la huella de carbono y son eficientes energéticamente, lo que proporciona un ahorro considerable de energía.
La buena noticia es que, según datos de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC), el 72% de los proyectos inmobiliarios en el país en estos últimos años están incorporando elementos de construcción sustentable en sus diseños y ejecuciones.
En este contexto, los principios fundamentales de la arquitectura bioclimática es que aprovechan los recursos naturales como el sol, el viento, la vegetación y la temperatura ambiental para crear condiciones de confort que reducen la necesidad de utilizar sistemas mecánicos de calefacción o climatización. En Argentina, por ejemplo, se orientan las ventanas hacia el norte para maximizar la captura del calor solar y minimizar la exposición a tormentas y frío provenientes del sur.
Otro punto clave es cómo está recubierto el edificio —esto incluye la fachada, muros, ventanas, suelo y techo- De acuerdo a su diseño se pueden obtener ganancias o pérdidas de calor beneficiosas para los ocupantes de la casa, así como también contribuye a ello la existencia de ventilación cruzada para generar movimiento de aire en verano.
Nuevas herramientas protectoras
Los nuevos modelos de construcción sustentable combinan resistencia, sustentabilidad y alto rendimiento energético. También alcanzan un aislamiento acústico del 40%, evitando cualquier ruido molesto del exterior.
Algunas de las herramientas que hoy logran generar ahorros eficientes de energía y de consumo son:
- Edificios que cuentan con tanques de recolección de agua pluvial para la limpieza de veredas y estacionamientos.
- La instalación de paneles solares, teniendo en cuenta que estas fuentes de energía renovables tienen un rendimiento duradero, conservando más del 70% de su potencia después de décadas de uso.
- Las ventanas eficientes de aluminio y PVC, que se destacan por el grado de hermeticidad que tienen debido a la aislación térmica y acústica; a su resistencia y mínimo mantenimiento, lo que ayuda a optimizar la energía consumida en la vivienda.
- La implementación de geotermia, que utiliza pisos radiantes y enfriantes junto con sistemas que aprovechan la temperatura del suelo mediante tubos de líquido refrigerante, reduce al máximo el consumo de energía eléctrica.
- La domótica convierte las casas en espacios inteligentes mediante la automatización. Con sensores IoT y redes simples, se controla la iluminación, persianas y temperatura desde el celular. Los sensores de movimiento optimizan el ahorro energético al ajustar funciones según la presencia en la habitación.
- El aislamiento de paredes y techos desde el exterior, junto con el uso de vidrios dobles aislantes, mejora significativamente la eficiencia energética de las viviendas. Estas técnicas reducen las pérdidas de calor y frío, contribuyendo a mantener una temperatura interior estable y a optimizar el consumo energético.
Todos estos recursos disponibles en la arquitectura sostenible no solo ayudan a proteger el medio ambiente, una práctica cada vez más exigida por los constructores, sino que también permiten un ahorro significativo en los servicios. Esto contribuye a la economía de los hogares al reducir los costos de energía y mantenimiento.
(*) El autor es director de QE2 Construcciones y Co-fundador de URBAN DNA Group