Fuente: La Nación ~ Marcos Juejati, de NorthBaires, avanza en el lanzamiento de tres proyectos y asegura que las crisis “siempre traen oportunidades”.
Si bien puede parecer una frase trillada, el mercado inmobiliario hace culto a la frase, “en la crisis hay oportunidades”. De hecho, si uno recorre la ciudad descubre la cantidad de obras en construcción que arrancaron en una industria en la que se están generando pocas operaciones, por lo menos en el mercado de las unidades usadas. Sin embargo, lo que sucede en el negocio de la construcción merece un análisis aparte. Y los números lo reflejan:
“El ladrillo representa una oportunidad para quienes tienen pesos porque pueden transformar ese flujo en dólares e inclusive multiplicar su valor”, relata Marcos Juejati, presidente de NorthBaires, la desarrolladora que avanza con el megaproyecto mixto de 56.000 metros cuadrados ubicado a pocos metros del cruce de la avenida Callao y Santa Fe en donde el metro cuadrado se vende a US$3800. Ahora, el desarrollador eligió este momento para lanzar emprendimientos en terrenos que había comprado hace tiempo. Uno de ellos es un edificio de ocho pisos que tendrá 36 unidades ubicado en una de las zonas más buscadas del barrio de Belgrano por la escasez de los terrenos: frente a la embajada de Alemania en una tierra de 15 metros de frente y 60 de fondo, justo en la subida de la calle Olleros, a pocos metros de la avenida Luis Maria Campos. “Es un área de la ciudad en la que las propiedades no bajan de los US$4000/m2″, detalla Juejati, que lanzará en las próximas semanas, el proyecto OM Olleros de 9000 metros cuadrados en el que se desembolsará US$10 millones y en el que las unidades en pozo se venden a US$3200/m2. Serán todos tres ambientes pero con la particularidad de que habrá opciones de diferentes superficies: entre 60 y 100 metros cuadrados. “Hicimos un estudio de mercado y detectamos la necesidad de esa tipología”, explica.
Por otra parte, la desarrolladora avanza con el emprendimiento de US$30 millones de inversión que se construye en los terrenos en donde funcionaban los estudios de la productora Polka en Chacapalermogiales, una de las pocas zonas de la ciudad en donde no bajaron los precios. “Estamos lanzando el segundo edificio de OM Palermo que estará listo en 27 meses y en donde los departamentos arrancan en valores de venta de US$2700/m2 con tickets desde US$75.000 en los monoambientes de alrededor de 30 metros cuadrados”, detalla el desarrollador que ya tiene vendido el 50 por ciento del emprendimiento. La particularidad de la obra es que se desarrolla en un terreno con doble salida que ocupa 35 metros de la avenida Jorge Newbery y otros 35 de la calle Maure, con una calle pasante. Es decir, son dos edificios con un pulmón en donde funcionarán los amenities que van desde un coworking hasta gimnasio.
“El negocio de real estate es de mediano y largo plazo y en contextos difíciles como los actuales hay oportunidades. Es un negocio contracíclico, y la realidad es que cuando uno recorre la historia de la Argentina prueba que el ladrillo siempre recupera valor”, justifica Juejati también por qué avanza con el que será el tercero de sus lanzamientos del año: un emprendimiento en la costa. Construirá un complejo en medio del bosque de Pinamar Norte, de 25 casas y 25 departamentos en los que destinará US$15 millones. “Será una especie de barrio cerrado en dos hectáreas con cuatro edificios y casas. En total sumarán 50 unidades”, detalla.
A la hora de responder por qué se mueve en un contexto de tanta incertidumbre, Juejati afirma que su empesa nació en pleno 2001 también en un contexto de crisis. “Soy un convencido de que si uno entra en este momentos y respeta algunas premisas básicas como el location, no sólo mirando el barrio sino la microzona dentro de el puede aprovechar la ventaja que genera un costo de construcción en dólares competitivo. Hay que animarse cuando el mercado está quieto”, concluye.