Fuente: La Nación – La empresa BTU fue adjudicataria de un tramo de la reversión del Gasoducto Norte, y superó a la sociedad Techint-Sacde y a la internacional Pumpco, cuyo fundador es el propietario del club Inter Miami, donde juega Lionel Messi.
El directorio de la empresa estatal Energía Argentina (Enarsa) aprobó la adjudicación del último tramo que faltaba para avanzar con la reversión del Gasoducto Norte, la obra que cambiará el sentido del flujo de gas y permitirá reemplazar las importaciones de Bolivia por la producción de Vaca Muerta. Contra todo pronóstico, la firma BTU presentó las ofertas más económicas y fue la ganadora, superando a la sociedad Techint-Sacde y a la internacional Pumpco, cuyo fundador es el propietario del club Inter Miami, donde juega Lionel Messi.
La adjudicación de esta obra estaba prevista para noviembre del año pasado, pero tras la victoria electoral de Javier Milei, la anterior gestión frenó el proceso para que quede en manos de sus sucesores. Al asumir el actual presidente de Enarsa, Juan Carlos Doncel Jones, se decidió volver a licitar el tramo, ya que todas las ofertas que se habían presentado en la primera licitación se habían excedido del presupuesto económico.
Mientras tanto, se avanzó con la adjudicación de los otros dos tramos de la obra a la unión transitoria de empresas (UTE) Techint y Sacde, la constructora de Marcelo Mindlin.
Al volverse a licitar el primer tramo como si fuera un nuevo proceso independiente del anterior, se habilitó que Techint y Sacde pudieran participar, ya que si se regía bajo las reglas de la primera licitación, ninguna empresa podría quedarse con los tres tramos de la obra. Por lo tanto, hubiera quedado descartada.
Pumpco, por su parte, también fue beneficiada con la decisión de licitar de nuevo el primer tramo, ya que en el proceso previo, durante la gestión anterior, había quedado descalificada por cuestiones técnicas.
Pese a que tanto Techint-Sacde como Pumpco tenían una nueva oportunidad, finalmente la empresa que presentó la menor oferta fue BTU, la constructora de la familia Mundin, que ya participó en la construcción de un tramo del gasoducto Néstor Kirchner (GPNK).
BTU hizo ofertas por $74.300 millones y $83.541 millones para los dos renglones que componen este tramo de la obra; mientras que la UTE ofertó $86.768 millones y $138.221 millones, y Pumpco, $88.291 millones y $133.823 millones.
Las ofertas económicas fueron analizadas por la Comisión Evaluadora de Enarsa y ayer se aprobó la adjudicación. Para el financiamiento de la obra, la empresa estatal cuenta con un crédito de US$540 millones del Banco de Desarrollo para América Latina y el Caribe (CAF).
El total del proyecto costaría US$740 millones, de los cuales el Estado ya financió alrededor de US$100 millones a través de la compra de los caños a Tenaris, del grupo Techint, quien fue adjudicada mediante una licitación.
Enarsa explicó que el renglón uno consiste en la construcción de 22 km del gasoducto de Integración Federal Tío Pujio-La Carlota, con caños de 36 pulgadas de diámetro, mientras que el renglón dos está compuesto por el tendido de dos loops (ampliaciones) paralelos al Gasoducto Norte de 62 km de extensión, con cañerías de 30 pulgadas de diámetro.
El proyecto se completa con otros 100 km del Gasoducto de Integración Federal, que ya está en construcción, y la reversión de cuatro plantas compresoras, dos ubicadas en Córdoba y las otras dos en Santiago del Estero y Salta, dijeron en la empresa estatal.
“La reversión del Gasoducto Norte, obra complementaria al GPNK, permitirá llevar el gas de Vaca Muerta a hogares e industrias de Córdoba, Tucumán, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, Salta y Jujuy, y el desarrollo a escala de nuevas actividades industriales, especialmente la minería de litio”, dijo la empresa.
Si bien se esperaba que esta obra estuviera lista para el invierno, debido a los retrasos en la licitación, en el sector no creen que se llegue a tiempo para la época de mayor demanda de gas.
Durante el invierno, en el norte argentino se consumen entre 18 y 20 millones de m3/d. Actualmente, con los barcos que se importan de gas natural licuado (GNL) y que ingresan al puerto de Escobar se transportan al norte del país 10 millones de m3/d, mientras que en las cuencas del norte se producen otros 3 millones de m3/d.
Según la estimación de demanda y precios del gas natural que publicó la Secretaría de Energía en la última audiencia pública, se espera que en el invierno se importen de Bolivia 4,5 millones de m3/d, a un valor de US$11,40 millón de BTU (medida que se utiliza en el sector).
En tanto, en julio se prevé importar 11,5 millones de GNL a un valor de US$13 el millón de BTU. El precio del gas promedio de Vaca Muerta para el invierno, por su parte, cuesta US$4,5 y aporta 55 millones de m3/d.