Fuente: Clarn ARQ – De las cinco cocinas que se exhiben en Casa FOA, cuatro cumplen más funciones que las de preparar los alimentos, servirlos y comerlos in situ, o forman parte de una propuesta integradora. Una con home office, una instalada en un departamento completo, un estar con cocina y la del loft se suman a la propuesta de la cocina de encuentro.
Mucho, seguramente, tienen que ver los maxiespacios de esta edición, que eligió como sede el edificio del ex Tiro Federal en el Parque de Innovación (Núñez). La generosidad de sus superficies permite el despliegue de la creatividad. La búsqueda de continuidad visual y de unidad conceptual saca partido de esta situación.
Que no haya barreras visuales es la clave para denotar la sensación de unidad. Se puede ver en todas las cocinas el planteo totalmente abierto que comunica de manera fluida un sector con otro.
En el caso del loft en el Espacio N° 39, la diseñadora Paula Martos cuenta que necesitaba un límite. “La cocina tenía que tener una espalda, no podía quedar en el aire. Entonces la caja sirvió, justamente, para guardar o contener el toilet”, pero en el planteo general se integra visualmente.
Espacio n°39 Loft: la isla central conecta, de un lado, las funciones propias de la cocina y del otro, se prolonga en una mesa en voladizo que aporta continuidad visual
“De este lado, está completamente revestida con fórmica metalizada (hecha con polímeros de metal). Me pareció muy interesante para trabajar un concepto un poco industrial en la cocina”, describe la coautora del proyecto junto con Hugo Gallego.
Una tendencia que se manifiesta en esta cocina y se verifica en otras es la elección de la isla como elemento dominante. En este caso, de un lado conecta con todas las funciones propias y del otro se prolonga en una mesa en voladizo que aporta también a la continuidad visual. “En la parte de atrás están la heladera, las alacenas, la coffee station que ahora está muy de moda”, completa Martos.
En el espacio N° 18, del Estar con cocina integrada, la isla se desarrolla a lo largo y se ensambla con un mueble bajo sobre el cual apoya la mesa de comer. Y en espacio N° 19, Cocina y home office, la isla central organiza y delimita la circulación en un ambiente integrado con diversos usos.
Espacio N° 18 Estar con cocina integrada: la isla central organiza y delimita la circulación en un ambiente integrado que propone diversos usos.
Otra tendencia que se repite no solo en las distintas cocinas de esta edición sino en algunas anteriores: los grandes espacios de guardado que ocultan de la vista a artefactos y electrodomésticos.
“Pensamos el armado del espacio como un sistema completo capaz de hacer coexistir el área de trabajo con el comedor. En la vista corta se reúnen las necesidades más puntuales de la cocina. Tras el mismo sistema de puertas, e iluminado estratégicamente, se encuentran los hornos, anafes, pileta y heladera”, detallan las socias de Fellerherc Arquitectas, a cargo del espacio N°18.
“Los paneles utilizados como revestimiento cumplen una función de almacenamiento y de organización creando diferentes espacios de guardado ocultos y discretos que se integran perfectamente con el diseño general”, suman los socios de Modulus, autores del espacio N° 19.
Espacio N° 19 Cocina y home office: la isla central organiza y delimita la circulación en un ambiente integrado con diversos usos
Según ellos, el diseño general de la cocina y home office se caracteriza por líneas limpias y una estética minimalista que busca lograr un espacio despojado visualmente.
“Basado en una paleta de colores neutros, líneas limpias y una combinación de texturas monocromáticas creamos un fondo sereno que se utiliza como base para resaltar los elementos principales de diseño y las diferentes texturas, que añaden además una sensación táctil al proyecto”, agregan.
“Se proyectó una cocina abierta, elegante, estilizada. La iluminación marca la verticalidad del espacio en diálogo perfecto con el resto del departamento, siendo parte del mismo en una lectura continua.
El mueble de cocina se destaca por su gran funcionalidad y diseño”, explican Wall Studio, Claudia Camisar Alterman y Adriana Teplixke, que diseñaron el espacio N°31, Departamento. Este lugar también ostenta una isla y agrega una bodega.
Espacio N°5 Cocina de encuentro: pared sectorizada con estanterías y retroiluminada, con sistema de puertas escamoteables
“Esta es la cocina de un chef que prepara sus comidas para un grupo de invitados. Es un proyecto centralizado que propone una cocina lúdica, teatral dispuesta en hemiciclo”, dice María Delia Zaccagnini sobre la Cocina de Encuentro by Johnson Acero, el Espacio N° 5.
De las tendencias que se ven en este espacio: una pared sectorizada con estanterías y otra retroiluminada que tiene un sistema de puertas escamoteables. En este caso, la elección también tiene que ver con la idea del teatro, donde detrás del telón se oculta lo que no se quiere mostrar.